Juan A. Pineda, médico experto en enfermedades infecciosas, investigador en virología clínica y docente de Medicina, ha realizado un extenso hilo en su perfil de Twitter sobre los plazos de la vacuna contra el coronavirus: “En realidad, yo creo que lo que preguntamos es: ¿cuándo volveremos a vivir como antes?”.
Pineda ha descrito que por la infección del Sars CoV-2 se desarrollan anticuerpos efectivos para controlar la infección en la mayoría de los pacientes. “En los que no, se desarrolla una respuesta inmune celular que también es protectora”, ha añadido junto a un estudio. El médico no ha tenido dudas en afirmar que “esta respuesta inmune produce un grado importante de protección frente a la infección, al menos durante los primeros meses”.
Para ello, habla de las reinfecciones, que tras nueve meses de pandemia son “aún raras”. “Las vacunas más desarrolladas producen también una potente respuesta inmune similar a la infección natural, por lo que deben proteger también, aunque este hecho tiene que ser firmemente probado por los ensayos clínicos en marcha”, ha proseguido.
El experto ha planteado cuál es la pregunta que todavía no tiene respuesta: cuánto va a durar la protección conferida por la respuesta inmune. “Aunque hay datos contradictorios, los anticuerpos frente a la Covid-19 en sangre se mantienen estables al menos 2,5-3 meses, y después podrían caer más rápidamente”, ha explicado.
Pineda señala no se sabe que ocurre una vez pasados los primeros tres meses. “Lo que sí es evidente es que en algunos enfermos la respuesta inmune o no se produce o es insuficiente o desaparece rápidamente y aparecen reinfecciones que, en buena lógica, deben ser más frecuentes en los próximos meses, a medida que vaya pasando más tiempo de la infección”, ha intentado adivinar.
Pineda ha vaticinado que una otra vacuna habrá demostrado “una relación eficacia/toxicidad favorable en los ensayos para el primer semestre de 2021”. Sin embargo, ha advertido “Pero de ahí a que volvamos a nuestra vida previa a la pandemia va un trecho. Para empezar, es probable que hagan falta dosis de recuerdo o revacunaciones para conseguir mantener una respuesta inmune protectora a largo plazo”.
“Por otra parte, es obvio que no es posible, ni por disponibilidad de dosis ni por capacidad del sistema sanitario, vacunar a todo el mundo a la vez. Habrá que diseñar una estrategia razonable de priorización. Por cierto, ahí me temo que vuelva a haber politización abundante”, ha indicado.
Pineda ha asegurado que antes de decir adiós a la mascarilla o la distancia de seguridad habrá que conseguir la ansiada inmunidad de rebaño, el que ha definido como “mayor problema”. Ha explicado que en esta enfermedad no se sabe cuál es el porcentaje que tiene que estar inmunizado y ha planteado lo que algunos modelos epidemiológicos calculan: que pueda estar entre el 50% y el 75% de la población.
Para este investigador no “será fácil conseguir este número a corto plazo”, ya que en España significaría tener más de 30 millones de personas correctamente vacunadas. “Creo que debemos prepararnos para 1-2 años más de actividad significativa de la Covid-19. En ese tiempo alternaremos oleadas, con muchas nuevas infecciones y algunas reinfecciones, con periodos de menor actividad, que requerirán medidas de control y desescaladas”, ha sentenciado.
“La intensidad de las oleadas será tanto mayor y la duración de los periodos de poca actividad tanto más larga cuanto más rápido vacunemos, mejor cumplamos las medidas no farmacológicas de prevención y más prudentes seamos con las desescaladas”, ha concluido, antes de repasar una a una todas las medidas de prevención.
En la infección por #SARS-CoV-2 se desarrollan anticuerpos efectivos para controlar la infección en la mayoría de los pacientes. En los que no, se desarrolla una respuesta inmune celular que también es protectora (2).https://t.co/IuKdnJvqrphttps://t.co/B8FO9HC3pz
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Las vacunas más desarrolladas producen también una potente respuesta inmune similar a la infección natural, por lo que deben proteger también, aunque este hecho tiene que ser firmemente probado por los ensayos clínicos en marcha(4).https://t.co/JnnK0Ptg3Shttps://t.co/1lcORGtMYg
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Aunque hay datos contradictorios, los anticuerpos frente a #SARS-CoV-2 en sangre se mantienen estables al menos 2,5-3 meses, y después podrían caer más rápidamente (6). https://t.co/cJ4d1g2BDJ
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Lo que sí es evidente es que en algunos enfermos la respuesta inmune o no se produce o es insuficiente o desaparece rápidamente y aparecen reinfecciones que, en buena lógica, deben ser más frecuentes en los próximos meses, a medida que vaya pasando más tiempo de la infección (8).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Pero de ahí a que volvamos a nuestra vida previa a la pandemia va un trecho. Para empezar, es probable que hagan falta dosis de recuerdo o revacunaciones para conseguir mantener una respuesta inmune protectora a largo plazo (10)
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Además, para suspender totalmente las medidas de prevención actuales de la #COVID-19, habrá que lograr inmunidad de rebaño, que impida la transmisión comunitaria del virus. Y ese es, en mi opinión, el mayor problema (12).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
En España, esto supondría más de 30 millones de personas correctamente vacunadas, teniendo en cuenta que habrá enfermos que no responderán. No creo que sea fácil conseguir este número a corto plazo (14).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Con las dudas que algunos grupos están planteando ya sobre las vacunas frente a la COVID-19, la velocidad extrema a la que se están desarrollando y se van a aprobar, y los efectos secundarios que producen, me temo que va a costar alcanzar ese número de vacunados (16).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Por tanto, creo que debemos prepararnos para 1-2 años más de actividad significativa del COVID-19. En ese tiempo alternaremos oleadas, con muchas nuevas infecciones y algunas reinfecciones, con periodos de menor actividad, que requerirán medidas de control y desescaladas (18).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Por ello, una vez más (nunca serán demasiadas) hay que recordar que debemos seguir haciendo, y preferiblemente mejor que hasta ahora: 1) Diagnóstico de casos; 2) Rastreo y cuarentena de contactos; 3) Higiene de manos; (20)
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
7) Evitar espacios poco ventilados y aglomeraciones, y 8) Búsqueda de nuevos tratamientos e inversión de verdad en Sanidad y en I+D+i en este tema (22).
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020
Y por último, recordar que, como el CDC aconseja, las medidas de control de la COVID-19 en la actualidad son aplicables también a quienes hemos pasado la enfermedad, puesto que no sabemos con certeza si una persona concreta puede reinfectarse o no (y 23).https://t.co/WtGxLyZ2np
— Juan A. Pineda (@japineda_) October 4, 2020