Qué es la biogerontología y cómo puede ayudar en la lucha contra el coronavirus

La biogerontología combina inteligencia artificial, biomedicina y gerontología (la ciencia que trata de la vejez y de todos aquellos fenómenos que la caracterizan) para estudiar, entre otras cuestiones, las características biológicas que participan en el proceso de envejecimiento en los niveles molecular, celular, bioquímico, genético y evolutivo, así como su interacción con los factores ambientales y socioculturales. También se ocupa de los aspectos clínicos y emocionales del envejecimiento. Esta disciplina se toma la longevidad muy en serio, al igual que toda la industria generada alrededor de este concepto, incluyendo la medicina preventiva y reparadora. De hecho, las condiciones de vida de los mayores “longevos” y los fenómenos biológicos involucrados en el proceso de envejecimiento son hoy objeto de estudio por parte de empresas, instituciones e incluso gobiernos.

El concepto de biogerontología saltó a la palestra casi a la par que supimos de la existencia de Alex Zhavoronkov, científico jefe de la Fundación de Investigación de Biogerontología y director general de la empresa de inteligencia artificial Insilico Medicine, quien hace ahora cinco años se hizo famoso al declarar que sabía cómo retrasar el envejecimiento y llegar hasta los 150 años de edad.

Por aquel entonces, Zhavoronkov aseguraba que “en dos o tres años tendremos medicamentos eficaces basados en medicinas que ya están en el mercado y que permitirán que la gente se mantenga joven y más sana. Además, estarán disponibles nuevos avances en medicina regenerativa y terapia génica”. Luego incluía otra ideas que parecían más peregrinas, como que el proceso de envejecimiento también se podía ralentizar alterando nuestro estilo de vida y evitando casarse y tener hijos. Pero el siempre las apoyaba con criterio científico: “las personas centenarias que viven en la actualidad nacieron en tiempos en los que no había antibióticos y los conocimientos sobre medicina y biología no eran muy distintos de los de la edad de piedra”. Teniendo esto en cuenta, Zhavoronkov, que se ha propuesto vivir 150 años para demostrar que sus teorías son ciertas, también sigue una dieta muy estricta combinada con ejercicio físico y la toma de suplementos alimenticios.

Geroprotectores para proteger a los mayores de la Covid-19

Recientemente, Zhavoronkov ha sido noticia de nuevo. En este caso ha propuesto una estrategia para volver a utilizar geroprotectores, los agentes terapéuticos que buscan afectar a las causas del envejecimiento y las enfermedades relacionadas con la edad con el objetivo de protegernos de algunas enfermedades asociadas a la vejez, como la osteoporosis, la insuficiencia cardíaca o la fragilidad de los hueso. Así, Zhavoronkov propone usar la rapamicina, el ribósido de nicotinamida, el mononucleótido de nicotinamida, la metformina y otros medicamentos para la prevención de la infección por SARS-CoV-2 en los más mayores. Además, ha instado al uso de “relojes de envejecimiento profundo baratos y mínimamente invasivos” para rastrear la eficacia de estas intervenciones geroprotectoras preventivas y para estratificar a los pacientes según la gravedad prevista de Covid-19.

El científico asegura que "estamos siguiendo varias estrategias para el descubrimiento de fármacos y su reutilización utilizando los últimos avances en inteligencia artificial. Sin embargo, está claro que el Covid-19 es una enfermedad gerófila y gerolávica. Es más severa y letal en los ancianos". Por este motivo, el equipo de Zhavoronkov cree que “los geroprotectores pueden ayudar a mejorar las probabilidades de los ancianos".