Revelan que las mujeres tienen más capacidad de compensar el daño generado por esta demencia
Según un estudio publicado en 'Alzheimer's & Dementia'
Un estudio internacional en el que han participado investigadores del Institut de Recerca Sant Pau (IR Sant Pau) ha demostrado que las mujeres que portan mutaciones genéticas causantes de demencia frontotemporal (DFT) presentan una mayor capacidad de compensar el daño cerebral que los hombres, al menos en las fases iniciales de la enfermedad.
El estudio, publicado en la revista Alzheimer's & Dementia, sugiere que el sexo es un factor biológico determinante en la evolución de esta forma hereditaria de demencia y abre la puerta a una medicina de precisión más sensible, ha informado este miércoles el centro en un comunicado.
El artículo se enmarca en una serie de tres trabajos científicos sobre las diferencias por sexo en las manifestaciones clínicas y biológicas de la DFT genética.
El neurólogo e investigador del IR Sant Pau Jesús García Castro ha dicho que el estudio apunta a que, a igualdad de daño cerebral, "las mujeres de con DFT rinden mejor que los hombres en pruebas de función ejecutiva y cognición social", lo que indica que disponen de una mayor reserva cognitiva y conductual.
La DFT es una enfermedad neurodegenerativa poco conocida, pero que ha cobrado relevancia tras el anuncio del diagnóstico del actor Bruce Willis, y a diferencia del Alzheimer, que suele afectar a la memoria, se manifiesta por cambios de personalidad, alteraciones en el comportamiento social y dificultades en el lenguaje o el habla.
Los investigadores pudieron analizar más de 670 resonancias magnéticas cerebrales y datos clínicos de 394 personas portadoras de mutaciones patogénicas y 279 familiares no portadores a lo largo de varios años, gracias al seguimiento sistemático del consorcio norteamericano ALLFTD.
El equipo utilizó una metodología conocida como enfoque de residuos, que permite cuantificar la reserva cognitiva: la discrepancia entre el rendimiento real de una persona y el que cabría esperar según el grado de regeneración, y reveló que las mujeres, especialmente aquellas portadoras de la expansión C9orf72, mantenían mejor funcionamiento ejecutivo y social pese al adelgazamiento cortical.
El estudio también observó una tendencia a un inicio más tardío de los síntomas en mujeres (hasta 6,5 años de diferencia de media), aunque este dato no alcanzó significación estadística por el tamaño muestral.
