Se vende pueblo "para entrar a vivir" por 4,8 millones de euros

Ni el Monopoly se había atrevido a tanto: sale a la venta un pueblo. Concretamente, se trata de Salto de Saucelle, una localidad situada en el Parque Natural de Arribes del Duero, una de las comarcas más bonitas de la provincia de Salamanca. Con 32 casas funcionales y la presencia de una imponente presa, el portal inmobiliario idealista.com ha informado en exclusiva de su salida al mercado por un montante que se acerca a los 4,8 millones de euros. 

Y no es el primero. Hace poco menos de una semana, saltaba la noticia de que un pueblo zamorano de nombre muy similar, Salto de Castro, estaba disponible al mejor postor. ¿El precio de salida? 260.000 euros. Según ha podido saber este medio, ya se ha decidido quién lo comprará. Las similitudes en ambos casos no se limitan al nombre y a la situación en la que viven. Ambas localidades forman parte del plan de alojamiento que la compañía Iberduero realizó para los trabajadores de sus presas. 

Un pueblo casi abandonado

Salto de Saucelle, que contaba con únicamente 24 habitantes a principios de siglo, se encuentra hoy prácticamente despoblado. Según los últimos registros de INE, allí solo vive una persona. Justo antes de la pandemia, el pueblo estuvo a punto de transferirse a Noval, un consorcio danés con capital estadounidense. 7 millones de euros ofrecieron, según asegura idealista, pero la llegada de la pandemia provocó que el interés se enfriara. 

Desde Royal Invest, consultora que se está encargando de gestionar la venta, han lanzado unas declaraciones explicando la calidad de las instalaciones y la comodidad del entorno. "Las casas fueron levantadas por ingenieros expertos durante el período de construcción de la presa. Por ello, presentan un estado más que apetecible". Hay que decir que la localidad ocupa un total de 188.000 metros cuadrados, de los que 5.500 corresponden a la superficie construida. En cuanto al emplazamiento geográfico, destaca su condición limítrofe con Portugal. 

En palabras de la consultora, "las casas cuentan con cocina vitrocerámica, nevera, microondas, lavavajillas, cafetera, exprimidor, menaje completo, aire acondicionado, calefacción, televisión, y equipos para instalar internet". “Es una muy buena inversión, ya que sin hacer ninguna rehabilitación puede dar una rentabilidad de hasta el 4%” añaden no sin antes advertir el hecho de que, con "un millón de euros más de inversión", la rentabilidad de la finca podría aumentar exponencialmente. 

Comprar pueblos, ¿para qué?

La compraventa de localidades en estado de abandono parcial o total se ha convertido en una realidad palpable en nuestro país. Cada vez son más las aldeas o poblados que, tras perder a casi todos sus habitantes, salen al mercado para encontrar una segunda vida en manos de un grupo inversor o de una empresa que quiera desarrollar alguna actividad allí. 

Los motivos que llevan a la adquisición de este tipo de inmuebles suelen ser la conversión del espacio rural en un ambiente dedicado a la hostelería. En todas sus facetas. Desde hoteles de campo hasta destinos de deporte multiaventura, la situación privilegiada de algunas de estas pedanías las hace muy apetecibles para la iniciativa privada.