El alimento que ayuda a proteger la memoria del envejecimiento

La canela es una de las especias más antiguas conocidas, originaria de Sri Lanka y tiene multitud de propiedades como su alto contenido en calcio y hierro, además de zinc, selenio, potasio, vitamina B6 y C, y cuenta con fibra, carbohidratos, vitamina A, vitamina B8, magnesio y fósforo, detalla la Fundación Española de Nutrición (FEN).

Pero no solo eso, y es que recientemente un grupo de científicos de la Universidad de Ciencias Médicas de Biryand (Irán) ha publicado el estudio Canela y función cognitiva: una revisión sistemática de estudios preclínicos y clínicos, donde explican los efectos que tiene esta especia en nuestra función cerebral basándose en las conclusiones de 40 estudios publicados anteriormente, 33 de ellos in vivo es decir con  seres vivos, cinco en cultivos celulares o tejidos post mortem conocidos como in vitro y dos clínicos con pacientes, y 2.000 bases de datos.

En concreto, los estudios anteriores han demostrado que esta especia tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y anticancerígenas, y también es capaz de estimular a nuestro sistema inmunológico, protegiendo al cuerpo de enfermedades y agentes patógenos.

"Estudios in vivo mostraron que el uso de canela o sus componentes, como eugenol, cinamaldehído y ácido cinámico, podría alterar positivamente la función cognitiva. Mientras que los estudios in vitro también demostraron que agregar canela o cinamaldehído a un medio celular puede reducir la agregación de tau, el amiloide β y aumentar la viabilidad celular", apuntan los autores del estudio.

Mejora la memoria y el aprendizaje

Pero no solo eso, el estudio iraní ha sido capaz de añadir un beneficio más de la canela: mejora la memoria y el aprendizaje gracias a sus componentes que ayudan a "disminuir la placa amiloide en el hipocampo y la fosforilación de la proteína tau".

 “La canela y, en particular, el cinamaldehído parecen ser enfoques eficaces y seguros para el tratamiento y la prevención de la aparición y progresión del alzhéimer”, aseguran los expertos. 

Otro de los puntos importantes de esta investigación es que los resultados no dependían de las dosis de canela que se tomaran, lo que sugiere que tanto en dosis altas como bajas, la canela tenía efectos positivos, haciendo que incorporarla a nuestra dieta sea tan fácil como espolvorearla sobre el café, el yogur o en galletas y tartas.

Ahora bien, a pesar de estas conclusiones, el equipo ha explicado que es necesario seguir investigando para entender el impacto de esta especia en nuestro cerebro, y comprobar cómo retrasa el deterioro cognitivo o mejora la salud.