Jueves 8 de febrero de 2024
ACTUALIZADO : Viernes 9 de febrero de 2024 a las 10:33 H
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Los grandes bancos españoles han registrado un récord de beneficios en 2023, gracias al impacto de la subida de los tipos de interés. Los seis mayores bancos españoles ganaron el año pasado algo más de 26.355 millones de euros, un 26,8% más que el resultado que obtuvieron en 2022. Se trata de la mayor cifra de la historia.
Las cuentas de los bancos se benefician de la subida de los costes de las hipotecas y del resto de préstamos por la escalada de los tipos de interés, acometida por el Banco Central Europeo (BCE) para controlar la inflación. Sin embargo, los costes se han mantenido muy contenidos dado que la banca no ha remunerado el pasivo de sus clientes, a través de depósitos o cuentas, al mismo ritmo. De hecho, España es el país de Europa donde menos se paga por el pasivo.
Así, si nos fijamos en el margen de intereses de la banca, que son los ingresos por intereses netos menos los intereses pagados, vemos que en 2023 subió un 20%, hasta los 84.752 millones de euros. Si a esta cifra añadimos el resto de negocios de la banca, sus ingresos totales el año pasado subieron un 15%, superando la barrera de los 109.000 millones de euros.
Estas cifras récord se producen a pesar del impuesto extraordinario que han tenido que pagar, establecido por el Gobierno el año pasado, y que tienen recurrido. Aseguran que sus beneficios no son extraordinarios, y que responden a la normalización de los tipos de interés. Sea como sea, en breve, tendrán que afrontar el primer pago del impuesto que se aplica en este 2024, precisamente, a cuenta de sus resultados del año pasado.
La lucha contra la exclusión financiera vivió ayer en el Congreso de los Diputados, un nuevo capítulo. Todos los grupos parlamentarios de la Cámara Baja, salvo Vox, apoyaron tomar en consideración una proposición de ley remitida por el parlamento de Cataluña para garantizar que haya, al menos, un cajero automático por municipio o en cada barrio, si éstos cuentan con al menos 5.000 habitantes.
La propuesta defiende que la instalación de estos cajeros corra a cuenta de los bancos. Los ponentes de la iniciativa, destacaron que el número de sucursales ha menguado en los últimos años en España, pasando de cerca de 46.000 en 2008 a unas 17.000 en septiembre de 2023.
Según ha calculado la Asociación de Usuarios Financieros, Asufin (@asufin_), en concreto, la ratio de habitantes por oficina casi se ha triplicado desde 2008: de tener que atender a unos 1.000 habitantes por oficina a tener que atender a 2.742, con menos empleados, casi la mitad (42%). El propio cierre de oficinas ya alcanza al 60% de las existentes en 2008, contabilizándose a cierre de 2023 un total 17.537, frente a las 45.662 de entonces. Y los cajeros no han llenado ese vacío de atención presencial: hay cerca de un 30% menos instalados, de 61.714 unidades a 43.620, en estos momentos.
“Seguimos defendiendo una digitalización a dos velocidades que no deje a ningún usuario de banca atrás, excluido”, dicen fuentes de Asufin. “Y no sólo porque nos encontramos con colectivos a los que hay que prestar atención por motivos diversos, como merma de las capacidades cognitivas u obstáculos físicos, en el caso de mayores o personas con discapacidad, sino también porque existen núcleos poblacionales en la España vaciada, así como en determinados barrios de las grandes ciudades donde no es posible encontrar puntos de atención bancaria”, añaden.
