Cómo calcular la cuota de autónomos teniendo en cuenta los ingresos reales al mes

El nuevo modelo de cotización de los autónomos acabará, desde el 1 de enero de 2023, con la posibilidad de que cada persona elija su base de cotización sin importar su volumen de ingresos. A partir de esa fecha, los autónomos estarán obligados a cotizar en función de sus rendimientos netos declarados, que los situarán en un tramo concreto al que corresponderá una base mínima de cotización y por tanto, una cuota mínima mensual.

Según las estimaciones del Ministerio de Seguridad Social, poco menos del 50% de los autónomos tendrá la opción de cotizar menos que en 2022, mientras que un 25% cotizará lo mismo y un 25% tendrá que cotizar más.

El nuevo sistema tiene en cuenta los ingresos mensuales y clasifica a los trabajadores con un baremo de 15 tramos de sueldo distintos, y a cada uno de estos grupos le corresponderá una cantidad de cuota de cotización. 

Según varíen los ingresos, el pago de la cuota se puede ir ajustando, y a final de año el organismo determinará si el trabajador ha pagado de más o menos, y si tiene que pagar lo que falta o devolverle dinero.

Cómo calcular los ingresos netos

Para poder calcular los ingresos lo primero que hay que hacer es tener en cuenta todas las facturas que el trabajador cobre mensualmente, una vez se hayan liquidado los impuestos como el IVA o el IRPF. 

Por otro lado, tendrá que saber también los gastos como el alquiler del local, o cualquier otro relacionado con el desarrollo de la actividad. La diferencia entre los ingresos y los gastos son los ingresos netos del autónomo.

Lo más normal es que esta cantidad varíe a lo largo del año, y por eso lo mejor es realizar una media ponderada (es un tipo de media que otorga diferentes pesos a los distintos valores sobre los que se calcula) para estimar el rango de cuota. Además, la Seguridad Social permite ajustar el tramo de cuota dos veces al año, y así los autónomos pueden pagar menos los meses que no facturen tanto.