Escrivá afirma que aprobará la subida del cálculo de la pensión por decreto antes de fin de año

Las mujeres empeorarán su pensión si el periodo de cálculo sube a 30 años

Escrivá dice que contar 28 años en vez de 25 beneficiará a la pensión de los trabajadores jóvenes

Rechazo total de pensionistas y sindicatos al 'plan Escrivá' por endurecer el cálculo de la pensión

Escrivá plantea que el periodo de cálculo de la pensión suba cinco meses por año desde 2027

"Habrá acuerdo" sobre la segunda pata de la reforma de las pensiones, donde se incluye el plan de aumentar desde 25 a 30 años el periodo de cálculo de la pensión, más el destope de las bases máximas de cotización y de la pensión máxima, antes de que finalice 2022, y esta nueva reforma se aprobará por Real Decreto Ley, tal como se hizo anteriormente con la reforma laboral o el sistema de cotización de los autónomos. Así de contundente lo afirma el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, que este viernes ha quitado importancia a las críticas demoledoras y la oposición frontal de sindicatos y patronal a las últimas propuestas del ministerio. 

"Pido tranquilidad, sigamos negociando. Estamos en la mesa de negociación y ya verá como hay acuerdo", ha reclamado el ministro en una entrevista en el Canal 24 Horas, que ha aprovechado para desvelar que CEOE no está haciendo "ninguna propuesta", mientras que asegura que los sindicatos UGT y CCOO sí están planteando sus iniciativas en las materias que hay sobre la mesa de diálogo social.

"Hemos pasado por esto muchas veces. Estas preguntas me las han hecho tantas veces... y siempre he contestado lo mismo, creo que la realidad demuestra que tengo alguna credibilidad en estos temas", ha recordado Escrivá, aludiendo a que, en las semanas previas a lograr pactos sociales, los distintos interlocutores suelen airear un desacuerdo que luego, según él, no es tal. 

El ministro se ha defendido de las críticas de CEOE y sindicatos, que le reprochan que la ampliación de los años de cálculo de la pensión no forma parte del Pacto de Toledo. Según Escrivá, con su propuesta, "sí estamos cubriendo una recomendación del Pacto de Toledo, que nos ha pedido que analicemos cómo podemos proteger a las personas que tienen carreras profesionales más volátiles, sobre todo mujeres y determinados perfiles que no poseen carreras laborales tan lineales como antes".

Contar 30 años, pero eligiendo los 28 mejores

Según el ministro, la forma de trabajar sobre ese asunto es operando sobre tres elementos del sistema: la longitud del periodo, poder elegir los mejores años o excluir los peores años y mejorar el tratamiento de las lagunas cuando una persona no ha estado en el mercado de trabajo. "Son esos tres parámetros sobre lo que estamos trabajando y estamos recibiendo incluso propuestas de los sindicatos".

En ese sentido, la propuesta del Gobierno es contabilizar 30 años, pero eligiendo los 28 mejores. Un nuevo sistema que, según Escrivá, "beneficiará a quien esté entrando al mercado laboral, a los más jóvenes, que enfrentan un futuro de incertidumbres y a quienes les será más beneficioso contar 30 años, pudiendo excluir los dos peores años, y además con un mejor tratamiento de las lagunas de cotización".

CCOO "alucina" con Escrivá y Díaz reitera su rechazo

La confianza del ministro en que logrará un acuerdo en esta materia de la reforma de pensiones, antes de fin de año, choca de plano, por ejemplo, con la posición de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que este viernes ha vuelto a rechazar los cambios en el periodo de cálculo, por suponer "un endurecimiento del acceso a las condiciones de jubilación". Díaz insiste en que aún no ha culminado la aplicación de los 25 años necesarios para el cómputo de la base reguladora (en vigor desde este 2022), por lo que nuevos aumentos son desechables.

También se opone al plan de Escrivá el secretario general de CCOO, Unai Sordo, que en sus propias palabras, asegura que "alucina" con las valoraciones del ministro sobre la marcha de las negociaciones. Sordo ha señalado que la mayor parte de las materias que el ministerio ha puesto sobre la mesa de negociación son "positivas", porque mejoran la estructura de ingresos de la Seguridad Social, a excepción de la que hace referencia a la ampliación del periodo de cálculo de la pensión. Sordo ve "factible" llegar a acuerdos con el Ministerio, salvo en lo que tiene que ver con el periodo de cómputo, que CCOO "no va a entrar a negociar", avisa.

"No hay adelanto de jubilaciones" por temor a 2023

Durante su entrevista televisiva, el ministro Escrivá ha negado que las incertidumbres laborales, la inflación disparada o los mayores requisitos de jubilación en 2023 estén provocando un adelanto de las jubilaciones anticipadas.

"Al contrario, lo que estamos detectando es la tendencia a extender más el periodo de actividad laboral", confirma Escrivá, recordando que las medidas ya en vigor de la reforma laboral de 2021, entre ellas, mayores incentivos a la jubilación demorada, están funcionando bien, y ya se empieza a reflejar en un retraso de la edad de salida del mercado laboral.

Destope de bases y pensión máxima

Dentro de la segunda fase de la reforma de las pensiones, el Gobierno quiere aprobar la vinculación de las bases máximas de cotización al criterio de revalorización de las pensiones, es decir, al IPC interanual medio de los doce meses anteriores a diciembre, más un incremento adicional anual de 1,154 puntos entre 2025 y 2050.

Así, entre 2025 y 2050, se propone que sean las leyes de Presupuestos de cada año las que fijen la subida de las bases máximas, teniendo en cuenta los parámetros anteriores (el IPC y el alza adicional de 1,154 puntos). En caso de que la inflación promedio que se toma como referencia para subir las pensiones sea negativa, se aplicará únicamente el incremento adicional de 1,154 puntos.

Esta subida de las bases máximas de cotización iría acompañada de un aumento de la pensión máxima, aunque en menor proporción. De este modo, el Gobierno propone que la pensión máxima suba también entre 2025 y 2050 con la referencia de inflación establecida para las pensiones contributivas y la pensión mínima (IPC promedio de los doce meses anteriores a diciembre), más un porcentaje adicional de 0,115 puntos, menor, por tanto, al planteado para las bases máximas.

¿Qué sucedería a partir de 2050? El Ministerio propone que, en el marco del diálogo social, se determine el aumento adicional que habrá de aplicarse a la pensión máxima "hasta alcanzar un incremento real acumulado del 30%". Si la referencia de inflación es negativa, la pensión máxima solo subirá en el aumento adicional establecido (0,115 puntos hasta 2050, según la propuesta del Gobierno).