Descubrimos Agüero (Huesca), uno de los tesoros secretos de Europa

Nuestro país atrae cada año a millones de turistas. Fueron más de 80 millones en 2019 y en 2020, a pesar de todas las medidas restrictivas y la dificultad para desplazarse, visitaron España 19 millones de personas. Y Agüero es un ejemplo de los motivos que atraen a millones de personas.

European Best Destinations es una web de viajes desarrollado para promover la cultura y el turismo en Europa. Cada año elabora varios rankings sobre destinos europeos. En 2020, su lista de los lugares secretos que conocer en Europa, recomendaba el pueblo oscense de Agüero. Nos hemos acercado para conocer qué tiene este lugar para merecer la calificación de joya oculta. Y la verdad es que el apelativo se queda corto.

Sin llegar a Agüero ya nos quedamos sin palabras. La panorámica de este pequeño pueblo con los mallos justo detrás ya nos impresiones. Este rincón lo encontramos en el Prepirineo aragonés, en una zona conocida como la Hoya de Huesca, una comarca dominada por los mallos, que son el límite entre la montaña pirenaica y el Somontano. Estas caprichosas forman confieren un maravilloso fondo para esta localidad, cuyas empinadas calles te atrapan y donde se puede disfrutar admirando algunas casas que conservan la castiza fisonomía del Prepirineo.

Una ruta sencilla y que merece la pena es rodear los mallos y llegar a la cueva de Al-Foraz, una enorme cueva con vistas maravillosas. Se trata de una ruta circular, que sale del pueblo y nos permite rodear estas originales formaciones para llegar a la impresionante cueva. Este paseo también nos va a permitir ver en todo su esplendor Peña Sola, el mallo de mayor altitud.

Dos iglesias de gran valor

Dos edificios eclesiásticos llaman la atención del visitante. Por un lado, la iglesia parroquial de El Salvador, en la plaza principal, en la que destaca la elevada torre de los siglos XVI-XVII, y la portada, una bella composición con arquivoltas semicirculares profusamente labradas con diversos motivos del arte románico.

Por otro lado, la iglesia de Santiago, que data del siglo XII y que es uno de los grandes tesoros artísticos de la comarca. Llama la atención porque no está acabada, su arquitecto la dejó a medias, pero no ha sufrido modificaciones ni reformas. A pesar de todo, su belleza es tal, que está declarada como Monumento Nacional. Este templo románico cuenta con un relieve en su portada en el que puede verse la adoración de los Tres Reyes Magos.