Real como la vida misma

Tengo 69 años y me jubilé con 63 y 48 años cotizados. Para mí sorpresa, con toda aquella historia de ser mutualista, me aplicaron los coeficientes reductores.

Nunca pensé ni imaginé que esto me pasaría. Comencé como electricista con 14 años recién cumplidos. Poco a poco empecé a sufrir en las obras, pues los inviernos en León son fríos de verdad y año tras año conseguí aprender mi oficio y luchar para salir adelante. Todo esto con sudor y lágrimas y echando horas desde la mañana a la noche.

Mi esfuerzo tuvo su recompensa y me instalé en las nuevas oficinas de la Caja Rural de León y me quedé para el mantenimiento de toda su red. En el año 92, pasamos a formar parte de Caja Galicia y seguí en esas tareas de mantenimiento hasta que llegó el final de las Cajas de Ahorro. Fue una debacle, comenzaron los ERES y todo se acabó. Para colmo, yo no entraba en ninguno por ser mutualista y lo mejor es que un buen día, aunque de bueno no tuvo nada, recibí una carta de "despido por bajo rendimiento". Eso me llevó al paro con 60 años.

Aguanté el paro y a los 62 me jubilé. Para mi sorpresa, cuando me hacen toda la documentación, veo que me descuentan un 18 por ciento de la base reguladora. Me quedé mirando a la señorita y le dije que eso no podía estar bien, que yo tenía 48 años cotizados. Me contestó: "Como si tuvieras 50". Los coeficientes reductores eran esos y si no estaba conforme, que hiciera una reclamación.

Seguiremos luchando por retirar los coeficientes reductores.

Si eres lector o lectora de 65Ymás y quieres denunciar cualquier situación de la que hayas sido testigo, dar tu opinión sobre cualquier tema de actualidad o sobre cualquier circunstancia que te afecte, puedes enviarnos una carta a nuestro diario. Es muy sencillo. Sólo tienes que entrar en CARTAS AL DIRECTOR o rellenar este formulario: