¿Tienes asma? No es excusa para dejar de hacer deporte

El asma es una de las enfermedades respiratorias más comunes entre los españoles. Más de dos millones y medio de personas sufren esta enfermedad crónica que inflama las vías respiratorias y dificultan la respiración del paciente.

Hasta hace tan solo unas décadas, se consideraba que las personas con asma no debían hacer deporte para evitar sufrir una crisis respiratoria durante su práctica. Pero es un pensamiento erróneo que a día de hoy no aconsejan los profesionales sanitarios.

El asma no debe limitar la vida de los pacientes, ya que los beneficios de la práctica deportiva también pueden llegar hasta estas personas. Es más, el sedentarismo está estrechamente relacionado con una situación de sobrepeso, lo que perjudica la respuesta a un tratamiento hacia esta enfermedad respiratoria.

Hay personas que sufren asma y pueden participar sin ningún problema hasta en los deportes más exigentes físicamente, como los maratones. Un ejemplo lo tenemos en reconocidos famosos como David Beckham, Mireia Belmonte, Miguel Induráin y Gemma Mengual.

De hecho, no hay un tipo de ejercicio preferente o especialidad recomendada, ni un límite de edad, intensidad o frecuencia cardiaca: pueden hacer de todo, tanto niños como personas mayores.

Sin embargo, sí que habrá que tomar algunas precauciones antes de realizar la actividad física:

• Realizar un precalentamiento apropiado, sobre todo si se va a practicar una disciplina muy exigente.
• No llegar a la extenuación. Si se realiza una actividad muy dura que llegue a poner contra las cuerdas a la persona y comiencen a aparecer síntomas asmáticos, hay que interrumpir de inmediato el ejercicio.
• Un entrenador especializado. Un profesional podrá asesorar y proponer rutinas de entrenamiento adecuadas para evitar que el ejercicio llegue a ser contraproducente.