La experiencia al volante hace que los conductores ejecutemos maniobras de manera automática y, muchas veces, no somos conscientes de que las podemos hacer mal o se nos olvida algún paso clave. Puede que algunas de las costumbres no sean alarmantes, pero otras pueden llegar a causar graves accidentes. En concreto, girar a la izquierda es considerada por los conductores como una de las maniobras más peligrosas en carretera. De hecho, algunos estudios sostienen que el 61% de todas las colisiones que ocurren en las intersecciones implican un giro a la izquierda. Seguro que ya conoces las normas, pero nunca viene mal refrescar la memoria con el fin de mejorar la seguridad vial. Por ello, cada cierto tiempo, la Dirección General de Tráfico (@DGT_es) recuerda cuáles son los cinco tipos de giros más habituales en carretera.
Para empezar, debemos tener en cuenta que "todos los cambios de dirección deben advertirse con suficiente antelación a los vehículos que circulen por detrás y habrá que cerciorarse de que la velocidad y distancia de los vehículos que se acerquen en sentido contrario permite efectuar la maniobra sin peligro", explica Roberto Ramos, técnico en Seguridad Vial de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE).
Si vas a realizar un giro considera ante siempre el tipo de vía y la situación.
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) August 17, 2021
Así se hace cuando se trata de realizar un giro sobre vías anchas. ⤴️
? https://t.co/BK9tT7PQqG#SeguridadVial pic.twitter.com/wi85CpK4pc
"Si vas a realizar un giro considera antes siempre el tipo de vía y la situación", recoge el tuit. En este caso, Tráfico muestra en el vídeo lo que debemos hacer para girar en una vía ancha.
Los pasos a seguir son los siguientes:
1. Primero, debemos asegurarnos de que el giro está permitido.
2. A continuación, observamos, señalizamos y nos cambiamos al carril izquierdo.
3. Cedemos el paso al sentido contrario y, en caso de que sea necesario, nos detenemos sin ocupar el carril contrario.
También denominados 'giros acondicionados'. Al igual que el anterior, nos encontramos en una vía ancha, pero aquí está prohibido girar a la izquierda, por lo que tenemos que salir de la vía por la que circulamos para efectuar la maniobra.
1. La señalización prohíbe hacer el giro directo.
2. Observamos, señalizamos y procedemos a girar a la derecha, manteniendo el carril.
3. En la intersección, cedemos el paso si no tenemos la prioridad.
Giro en carretera convencional con visibilidad reducida
Cabe recordar que la visibilidad reducida implica que debemos extremar la precaución. Eso sí, si es nula, será mejor continuar hasta dar con un lugar seguro donde realizar la maniobra. Cuando lo encontremos, tenemos que hacer lo siguiente:
1- Vigilar con atención al vehículo de detrás, si lo hay, y señalizar el giro con mucha antelación.
2. Ceder el paso a los vehículos del carril contrario y, si es necesario, detener el coche junto a la línea central.
Este tipo de giro se ejecuta cuando dos vehículos se aproximan de frente a una intersección. Así es como deben realizarse:
1. Tomamos como referencia el centro de la intersección y giramos dejándolo a nuestra izquierda, en ángulo de 90º.
2. Si viene otro vehículo en sentido contrario, debemos rebasarlo y realizar el giro por detrás de él.
3. Ojo a la nueva vía: puede haber peatones cruzando.
Cabe recordar que por el carril bus pueden circular autobuses, taxis, motos y bicicletas y que todos estos vehículos tienen prioridad con respecto al resto. Los turismos tienen prohibido circular por él, pero pueden invadirlo si tienen que realizar un giro a la izquierda. La DGT recuerda lo siguiente:
1. Ante todo, tenemos que respetar la marca vial.
2. La norma solo permite invadir un carril bus para girar.
3. Los vehículos autorizados a circular por el carril tienen prioridad. Si hay motos y bicis, debemos extremar la atención.
4. Hay que cederles el paso, deteniéndonos si fuera necesario.
