Acaba con las grietas de las manos de forma sencilla y natural

El clima, el uso excesivo de productos químicos o la falta de hidratación u oxígeno son algunas de las causas que pueden estar detrás de la aparición de grietas en nuestras manos. Existen algunos remedios naturales que pueden ayudarnos a tratar este problema que, si no tratamos a tiempo, puede agravarse.

Circulación

En ocasiones, los problemas circulatorios pueden estar detrás de la aparición de grietas en nuestras manos. Si el oxígeno no llega correctamente a nuestras manos por medio de la sangre, la piel de esta zona de nuestro cuerpo puede deshidratarse.

Existen alimentos que nos ayudarán a mejorar nuestra circulación como por ejemplo el ajo, la cayena, el jengibre o la miel.

Igualmente, es importante una ingesta abundante de vitaminas A, B6, C y E o minerales como el selenio o el silicio para ayudar a nuestra piel a luchar contra el envejecimiento, a la vez que aportan una mayor flexibilidad, evitando la aparición de grietas en nuestras manos.

Otra opción para reactivar nuestra circulación de las manos es mediante baños alternos de agua fría y caliente.

Aceite de rosas

Las rosas son flores con un alto poder hidratante y suavizante. En este sentido, uno de los primeros remedios naturales sería una crema de rosas y limón. Para ello, maceraremos durante una semana pétalos de rosa y cáscaras de limón en aceite de oliva. Pasado ese tiempo lo filtraremos y lo tendremos listo para aplicarlo un par de veces al día sobre la zona a tratar.

Aloe vera

Es una de las plantas más cicatrizantes y nutritivas que existen. Ayuda a regenerar los tejidos muertos de la piel.

Podemos aplicar un poco de gel de aloe vera mezclado con aceite de rosa mosqueta sobre nuestras manos.

La vaselina también será muy eficaz cuando se tiene este problema de sequedad.

Consejos para tratar las grietas

Además de estos remedios, existen cremas en el mercado específicas para este tipo de problemas pero que debemos aplicar correctamente.

En este sentido, nuestro consejo es que la crema sea espesa. Igualmente, se recomienda aplicarla cuando la zona esté blanda tras haberla lavado.

Para una máxima hidratación se aconseja aplicar la crema a la hora de acostarse y cubrir la zona dañada con algún guante, cinta adhesiva o venda.

A las personas que sufren este problema se les recomienda utilizar guantes en caso de tener que utilizar productos agresivos, así como para fregar los platos. Igualmente, es recomendable utilizar agua templada, ya que la fría o la caliente en exceso no son beneficiosas para nuestra piel.