Cómo eliminar la cal de vasos y copas de cristal y que queden brillantes

El lavavajillas se ha convertido en un electrodoméstico más en muchos hogares. Un aparato que nos hace la vida más cómoda, nos permite disponer de más tiempo para otros menesteres y, además, deja el menaje impecable.

Hasta aquí todo muy bien, pero con el paso del tiempo vemos que los vasos y demás objetos de cristal van perdiendo brillo, aparecen manchas de cal y se vuelven opacos mucho más rápido que cuando los lavábamos a mano, dejando la cristalería totalmente deslucida.

Te enseñamos como eliminar la cal que se acumula en los vasos con unos trucos caseros y económicos y así devolverle a la cristalería todo su esplendor y translucidez.

Además del desgaste natural del cristal, existen otros motivos por los que los vasos y copas adquieren ese tono blanquecino y antiestético:

• Cal: es la principal responsable de las manchas, especialmente si el agua de la zona es dura.

• Déficit de sal en el lavavajillas: con la sal lo que hacemos es ablandar el agua, es decir, contrarrestar la cal del agua, por lo que es necesario ir reponiéndola periódicamente.

• Déficit de abrillantador: el abrillantador juega un papel importante en el lavado del menaje, permite que este se seque bien y quede reluciente. No usarlo hará que las copas queden manchadas por la cal de las gotas de agua.

• Demasiado detergente: se puede utilizar detergente en pastilla o detergente líquido. En este último caso, si ponemos demasiado y no hacemos un aclarado acorde a la cantidad de detergente, quedarán manchas más fácilmente.

Recuperar el brillo

Una vez detectadas las causas por las que se adhiere la cal a los vasos es momento de ver cómo recuperar el brillo y la transparencia y así evitar tener que reemplazar los vasos y copas por unos nuevos.

Existen algunos remedios caseros que pueden ayudarnos en esta tarea antes de optar por cambiarlos:

• Sal y limón: prueba a frotar de manera enérgica el interior del vaso con medio limón. Ten cuidado de que no se rompa el cristal si este es fino. Después de impregnar bien el vaso echa un poco de sal, espárcela bien por el interior y vuelve a frotar. Poco a poco se irá eliminando la cal. Finalizado el proceso lava con agua y jabón, deja secar al aire y después pasa un paño seco.

• Bicarbonato: mezcla dos cucharadas de bicarbonato de sodio, una cucharada de sal y agua caliente en el interior del vaso, copa o jarrón. Deja actuar durante una media hora. Pasado este tiempo lava con agua y jabón y seca bien.

• Vinagre blanco: una disolución de vinagre y agua a partes iguales también es una buena opción. En este caso será necesario sumergir los vasos y copas en esta mezcla durante dos horas o si lo prefieres toda la noche. Después solo será necesario lavar y secar.

• Dentífrico: con la ayuda de un cepillo o un paño frota el vaso con dentífrico dejando actuar unos minutos. Después lava con jabón y abundante agua fría.

Lamentablemente, si ninguno de estos trucos ha sido suficiente para recuperar todo el esplendor de las copas y no quieres ponerlos en la mesa con ese tono blanquecino y opaco, no quedará más remedio que reemplazarlos por unos nuevos, al menos los días en que quieras que la mesa luzca perfecta.