El gigante alemán Haribo ha emprendido una batalla legal contra la start-up española Ositos con alcohol que produce y comercializa gominolas en forma de ositos y rellenas de alcohol.
Los responsables de esta start-up, creada hace un año por tres estudiantes de Bilbao, afirman a la agencia AFP estar "asustados", ya que Haribo es una gran empresa que "si quiere nos hunde", aunque aseguran que continuarán la producción y comercialización de sus "ositos borrachos porque vemos que a la gente le gustan".
Al parecer Haribo alega que las golosinas de la empresa española y las suyas, ambas con forma de oso, se parecen demasiado, por lo que "ha lanzado el procedimiento jurídico para proteger las marcas registradas", ha explicado un portavoz de la empresa a AFP.
Ander Méndez, CEO de "Ositos con alcohol", ha relatado a la citada agencia que se llevó un susto cuando hace dos semanas recibió en casa el burofax de un bufete de abogados contratado por Haribo.
El documento, consultado por la AFP, sostiene que hay una "gran similitud entre ambos productos, lo que a juicio de Haribo constituiría una vulneración de sus derechos de propiedad intelectual". Y propone a los tres jóvenes empresarios vascos solucionar "amistosamente" el problema dejando de producir y vender "cualquier producto bajo el símbolo en disputa", "destruir y dejar de enviar cualquier tipo de catálogo en papel u online", abandonar su marca registrada en España, "retirar los productos de su web", y aceptar firmar los documentos que presenten sus abogados para "transferir la gestión y propiedad del dominio ositosconalcohol.com" a Haribo.
Ositos con alcohol vende su producto por internet y en locales de ocio en España, sobre todo en el País Vasco, pero también en Valencia, y arrancó en enero de 2019.
Los ositos son gominolas de cinco colores distintos, con 15 grados de alcohol dentro (ron-piña, ginebra-fresa, vodka-naranja, whisky-cola o tequila-limón).
Una copa de vino equivale a entre 7 y 9 ositos, y un gin-tonic a entre 15 y 17.
