Martes 1 de octubre de 2019
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Quizás la primera consideración sobre la evolución de la figura del mayor en los últimos 20 años debería ser que la esperanza de vida media nacional en 2019 es de 83,24 años y en 1980 era solamente de 75,35. Y si añadimos la observación de lo que puede ir pasando en el futuro, llegaríamos a la consideración que el estadounidense James Vaupel se planteaba: “Si durante los últimos 100 años hemos conseguido vivir unos 40 años más ¿Por qué no vamos a ganar otros 40 en el próximo siglo?”
Hay varios campos a analizar en todo este camino de los mayores. Por una parte el lógico avance en el conocimiento y consideración de los motivos sociales, económicos, demográficos, sanitarios y epidemiológicos, en relación con el trabajo “¿Por qué vivimos más?. Descomposición por causas de la esperanza de vida española de 1980 a 2009”, elaborado por Juan Manuel García González, de la Universidad Internacional de La Rioja.
Igualmente el progreso en el dominio de ataques a la salud como los accidentes cardiovasculares, cáncer, alzhéimer, la reducción del tabaquismo, … permiten a los mayores afrontar estos períodos de su vida con más seguridad, volcando su atención a variadas atenciones sociales.
Como destaca en concreto el Observatorio de las Personas Mayores del IMSERSO, cuando hace un análisis del ocio y resume:
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Sedentario (leyendo revistas, libros, atendiendo emisiones de radio, …)
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Doméstico (manualidades en el hogar, de ayuda, …)
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Social (relación con amigos, familia, centros sociales, ….)
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Saludable (ejercicio, deportes, baile, …)
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Aprendizaje (nuevas actividades, ordenador, móvil, …)
Y como resultado de todo ello, llegamos al Asociacionismo progresivo de los mayores en Grupos, Asociaciones, Federaciones, etc que tratan de mantener al mayor informado de sus derechos y buscan caminos de eficacia en la gestión y defensa de los mismos.
Luis Álvarez, presidente de la Asociación Grupo de Mayores de Telefónica (AGMT) y miembro del Comité Asesor de 65Ymás.
