Todo sobre el anisakis, el gusano más temido

Un plato de pascado que en un principio nos encantó puede llevar truco. Si el pescado no se ha tratado bien este pescado puede tener un invitado que invada nuestro cuerpo, el anisakis.

Este parásito es el responsable de causar anisakiasis. Este gusano (de poco menso de 0,1 milímetros, desarrolla su vida en los mamíeros marinos como ballenas, delfines y focas que comen a su vez peces y crustáceos con este insecto.
Una vez que la persona ha comido un pescado infestado de anisakis, la infección se realiza por su larva, pero no continúa desarrollándose en nuestro sistema digestivo ya que el organismo lo elimina. Bien es cierto, que esta expulsión de produce cuando ya se ha sufrido las seculas de la infección y la enfermedad.

Prevención

Desde hace pocos años se ha puesto de moda en la gastronomía el consumo de pescado crudo o insuficientemente cocinado, un riesgo para contraer esta enfermedad. Solamente la evitaremos si previamente se ha congelado durante mínimo 3 días a -20ºC.

Si no seguimos estas pautas puede que comencemos a notar alguno de los síntomas asociados a la aparición de este parásito. Por un lado está la reacción alérgica, que se manifiesta con lesiones cutáneas, prurito o incluso anafilaxia. El segundo grupo de síntomas embarcan todo el dolor abdominal, las náuseas y los vómitos.

Si padecemos alguno de estos síntomas, y los asociamos a un plato de pescado que comimos recientemente, debemos ir al médico. Un diagnóstico precoz servirá para extraer los gusanos de anisakis mediante una endoscopia, pero si se demora, esta extracción ya es más complicada porque el parásito se habrá introducido en la mucosa intestinal. En la mayor parte de los pacientes los tratamientos de los síntomas con, por ejemplo, antiácidos, corticoides o antihistamínicos, serán suficientes para la eliminación de esta patología.

¿Y después? ¿Puedo comer pescado?

Una vez que se ha tenido esta enfermedad, es normal que miremos con más cuidado a nuestros platos, pero sí, podremos seguir comiendo pescado. Hay una única situación en la cual dependerá del consejo médico el seguir consumiéndolo, si el anisakis nos ha producido una reacción alérgica. En este caso se debe evitar radicalmente el comer pescado crudo o poco cocinado, y bajo al supervisión del profesional quien controlará que no pertenecemos aun grupo con una hipersensibilidad a los componentes de esta enfermedad.