Cómo evitar las discusiones familiares en las comidas y cenas de Navidad

Nos encontramos en Navidad, la época del año donde las emociones se intensifican, junto con los gastos y las prisas, que generan estrés surgiendo así agobios, roces o preocupaciones. También las altas expectativas que tenemos en estas fechas, hacen que surjan discusiones y ansiedades.

Los temas de conversación para evitar dichos conflictos siempre serán aquellos que desvíen la atención de aquello que genere malestar, hiera o incomode a nosotros mismos o a los demás. Lo mejor siempre es hablar en positivo y de temas sin transcendencia para ninguno de los asistentes y por supuesto, sin críticas ni juicios.

Precisamente, hay que mantener una actitud de empatía hacia los demás, es decir, de “ponerse en la piel del otro” para hablar sin ofender. Y sobre todo, tener en cuenta que si ya había un ambiente crispado creado por otras ocasiones, tener enmente que ahora no es el momenton de resolverlo ni sacarlo.

María Consuelo Álvarez Fresno, psicóloga colegiada con la que 65YMÁS ha tenido la oportunidad de hablar, aconseja que hay que evitar conversaciones tristes que hablen de enfermedades, de muertes o que generen ansiedad, así como temas controvertidos en los que pueda haber discrepancia como con la religión, la política o el fútbol. 

"Durante las conversaciones tenemos que mantener distancia con las personas menos afines a nosotros, respirar profundo cuando alguien genere malestar con sus comentarios, poner límites con amabilidad y por supuesto, evitar hablar con indirectas o segundas intenciones", explica María Consuelo. 

Algunos consejos

Cuando nos encontremos en ese momento de no tener muchas ganas de celebrar las fiestas y de tener que ir a cenar o comer con algunos familiares, tenemos que pensar que acudir a las reuniones de manera positiva, puede ser beneficioso para nosotros y para los demás. 

También es importante mantener el humor siempre que se pueda, ya que es una estrategia que funciona muy bien cuando hay personas con las que ya has tenido conflictos o que por lo general te desagradan. 

Por otro lado, es conveniente hacer comentarios asertivos, de manera que no critico las ideologías de otras personas sin sobreponerme y siempre pensando desde nuestro punto de vista y sentimientos. 

Por último y también según indica María Consuelo, tenemos que vivir unas navidades desde el amor, respeto y aceptación hacia nosotros mismos y los que nos rodean de la mayor manera posible.