Sociedad

Estos son los métodos históricos más extravagantes en búsqueda de la inmortalidad

Irene Alcaraz

Sábado 2 de julio de 2022

7 minutos

Algunos siguen suscitando investigaciones científicas en la actualidad

Estos son los métodos históricos más extravagantes en búsqueda de la inmortalidad
Irene Alcaraz

Sábado 2 de julio de 2022

7 minutos

Pase lo que pase, “al final del juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja”. No hay persona que haya alcanzado la inmortalidad, pese a que ha habido intentos de toda clase: alquímicos, crueles, estrafalarios e incluso divertidos. Recopilamos aquí algunos de los más extravagantes. Y ojo, porque muchos de ellos se están probando también en la actualidad.

La piedra filosofal

La alquimia ha generado pasiones entre algunos de los personajes más famosos de la historia, desde Paracelso a Isaac Newton e incluso el monarca Felipe II. La piedra filosofal sería la receta por la cual, además de convertir los metales en oro, se podría alcanzar la eterna juventud. Sin embargo, las recetas incluían a veces ingredientes más difíciles de lograr que la propia inmortalidad, como águilas de mercurio o dragón ardiente (o así lo sugiere la receta de Newton).

Incluso, en algunas áreas asiáticas, se propuso que la ingesta de oro puro; siendo el elemento divino, debía inducir a los seres humanos a la inmortalidad.

Estos son los métodos históricos más extravagantes para lograr la inmortalidad

Fuente de la eterna juventud

“Pero el que beba del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le daré se convertirá en él en una fuente de agua que brota para vida eterna”. Así reza el versículo 4:14 del Evangelio de San Juan. Estas ideas presentes en los textos sagrados calaron en los conquistadores españoles, que se lanzaron a buscar por las tierras americanas el agua que les daría la inmortalidad. Uno de ellos, Ponce de León, dijo haberlo logrado. Aunque, una vez más, las pruebas lo niegan.

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Beber sangre humana

Desde la Edad Media, algunos personajes influyentes como el Papa Inocencio VIII o la condesa Elizabeth Báthory han bebido sangre como método curativo o para prolongar su juventud. En muchas ocasiones se escogía a niños y sobre todo niñas que aún no habían tenido su primera menstruación para tales cometidos.

Aunque esto pueda sonar macabro y draculesco, lo cierto es que en la actualidad es uno de los cauces para prolongar la vida más investigados. Un estudio de la Universidad de Standfore publicado en 'Nature' aseguraba que, tras realizar una transfusión de sangre de ratones jóvenes a ratones más mayores, los mayores mostraban una mayor actividad neuronal que podría servir para paliar el deterioro cognitivo.

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De hecho, hasta 2019, la empresa Ambrosía Medical estuvo ofertando transfusiones de sangre para el rejuvenecimiento, lo que terminó siendo investigado y prohibido por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos).

Polvos mágicos y egipcios

Metales, sangre y algo más: polvo. Ansiosos por hallar el método para la inmortalidad, una de las ocurrencias más extravagantes fue el cuerno de unicornio. En la Edad Media y principios de la Edad Moderna, por las vastas regiones europeas se traficaba con marfil o cuerno de rinoceronte pulverizado, asegurando que era un fantástico rejuvenecedor.

Otra limadura que se puso de moda fue el polvo de momia. Esta historia procede de lo que llamaríamos un “teléfono escacharrado” en la transmisión de los saberes farmacológicos.

Según cuenta la asociación de egiptólogos, Amigos de la Egiptología, confundieron la palabra persa “mummia”, que significa betún, con los cadáveres embalsamados. “Las consecuencias fueron nefastas, hubo una fiebre de caza de momias egipcias. Los cuerpos momificados se molían en polvo y se distribuían desde Egipto a los boticarios de toda Europa”.

Trasplantes de testículos

A principios del siglo XX, el doctor Serge Vóronov puso en boga un método quirúrgico para devolver el vigor a las personas mayores. ¿Cómo? Cosiéndoles genitales de monos. Según Vóronov, la falta de vigor sexual según avanzaba la edad era la clave del envejecimiento, por lo que, de recuperarla, también podría alargar su vida más años.

Estos son los métodos históricos más extravagantes para lograr la inmortalidad

 

Lejos de parecer una locura, la sociedad del momento acogió la ocurrencia con fascinación y fueron muchos pacientes los que se sometieron a esta cirugía. Otros cirujanos trataron de mejorar su idea, como el doctor John Brinkley, que comenzó a hacer lo mismo con testículos de cabra.

Líneas de investigación actuales

Aunque todavía no se ha encontrado un elixir de la inmortalidad, eso no significa que se haya dejado de buscar. Actualmente se están bifurcando los caminos de la eternidad en dos direcciones. Por un lado, están quienes paralizan su cuerpo para cuando este momento haya llegado, ya sea mediante la criogenización de su cuerpo (congelación con nitrógeno líquido) o la reproducción digital de su cerebro.

Por otro lado, se están investigando, de la mano de inversiones multimillonarias por parte de los grandes líderes de las Big Tech, toda suerte de métodos. Jeff Bezos, por ejemplo, está invirtiendo en reprogramación celular, que permitiría alargar la vida útil de las células para vivir todavía muchas más décadas. Otros apuestan por descifrar todo el código genético y modificar los genes del envejecimiento. E incluso algunos programas como Iniciativa 2045 plantean empezar por el principio y diseñar desde cero un ser humano tan perfecto que no se deteriore nunca.

Sea como fuere, las promesas de inmortalidad han dado la sensación de estar al alcance en todas las épocas, y siempre se terminan aplazando.

Mientras los métodos artificiales no den sus frutos, lo más recomendable es apostar por los consejos que favorecen una vida saludable: alimentación, ejercicio y descanso.

Sobre el autor:

Irene Alcaraz

Irene Alcaraz, redactora

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