Formas sencillas y útiles para eliminar la cal de grifos, mamparas y lavabos

Cualquier superficie por donde corre el agua puede verse afectada con el tiempo por los depósitos de cal, quitando el brillo a grifos, mamparas o lavabos y dejando unas antiestéticas manchas blancas. 

La acumulación de cal es inevitable y su aparición se da en todas aquellas zonas en las que el agua está presente. Cuando esta se evapora, los depósitos minerales del agua (carbonato cálcico y magnesio) siguen presentes lo que permite la aparición poco a poco de una pequeña capa de cal o óxido de calcio que con el tiempo se va haciendo más sólida y en algunas ocasiones, es muy difícil eliminar. Existen diferentes remedios caseros para atajar este problema y recuperar el brillo en nuestro lavabo, veamos algunos:

En los grifos y lavabos

Uno de los elementos donde se evidencia más la presencia de cal son los grifos donde es fácil verlos sin brillo y con manchas blancas. Para ayudarnos a recuperarlos, utilizaremos el vinagre que es muy útil para eliminar la cal. Simplemente deberemos frotar la superficie con un paño empapado en una mezcla de agua y vinagre y dejaremos actuar durante unos minutos. Después enjuagaremos con agua y repasaremos con un trapo seco. 

En los casos en los que la acumulación de la cal es elevada y está demasiado incrustada, frotaremos toda la superficie con medio limón directamente. A continuación, humedeceremos el trapo en el zumo de limón, envolveremos el grifo y dejaremos actuar durante una hora. Para finalizar, enjuagaremos con agua y secaremos. 

Para las manchas de cal en la pila del lavabo el limón también puede ser muy efectivo para eliminarlas. Como en el caso anterior, consiste en verter el jugo de un limón por todo el lavabo, o incluso restregarlo, y dejar actuar. 

En las mamparas del baño

El uso de la ducha a diario provoca que poco a poco se vayan depositando mínimas partículas de cal en las mamparas dando la sensación de que está siempre sucia. Lo mejor es, tras cada uso, secar la mampara con una toalla para evitar que se vayan acumulando los restos de cal. Pero, si estamos ante el caso de que ya tenemos las manchas blancas, lo que deberemos hacer es mezclar vinagre y agua y rociarla sobre el cristal con un envase con vaporizador. Dejaremos que el vinagre haga su trabajo durante unos minutos antes de retirar el producto. Y para la alcachofa de la ducha, si la cal ya está incrustada, lo mejor es desarmarla y dejar las piezas en remojo con vinagre durante varias horas.

En los inodoros

Los inodoros tampoco se libran de la presencia de cal si no realizamos un adecuado mantenimiento. Para eliminarla, lo mejor es mezclar en un envase con vaporizador el zumo de un limón exprimido con media taza de vinagre blanco. Rociaremos sobre los restos y manchas de cal que queremos eliminar y dejaremos actuar durante unos 30 minutos.

Pasado este tiempo, solo tendremos que limpiar las zonas con la escobilla del wáter y si la mancha de cal se nos resiste, podremos utilizar piedra pómez que habremos mojado previamente en agua tibia para no rayar la superficie del inodoro.