Con la vuelta al cole, durante los meses de septiembre y octubre, numerosos coleccionables salen al mercado y se publicitan en los distintos medios de comunicación de forma insistente. Estas colecciones se caracterizan cada vez más por su diversidad. Ahora bien, "existen prácticas poco lícitas y muy comunes que deben ser tenidas en cuenta si queremos quedar satisfechos", advierte la Asociación Española de Consumidores (Asescon @consumoasescon).
Uno de los errores más habituales a la hora de emprender una colección es dejarse llevar por el precio con el que estos productos salen al mercado. "Se trata de los llamados precios gancho, que siendo muy bajos en la primera entrega, suben a partir del segundo fascículo y progresivamente van evolucionando y aumentando a medida que la colección avanza. En algunos casos, según comprobaciones que hemos realizado en las publicidades de estos coleccionables, el incremento supera el 1.500% respecto a la primera entrega", argumentan desde Asescon.
Otro de los consejos para acertar y no lamentarse es tener en cuenta la posible variación futura en el precio, que debe venir especificada en el fascículo. Pero, en muchas ocasiones, las empresas adjuntan esta información de forma casi ilegible, ya que los datos aparecen impresos en un cuerpo de letra muy reducido.
Otro de los problemas con los precios es que son equívocos porque la mayoría acaba en 99 céntimos; son los llamados precios psicológicos no redondeados. Por esta razón, el producto parece más económico de lo que en realidad es.
50 fascículos de media por colección
La Asociación Española de Consumidores recomienda prestar atención al número medio de entregas que, por lo general, ronda las 50 de media. "En ocasiones, a nuestros medios de contacto llega un gran número consultas, quejas y reclamaciones de consumidores que han visto cómo la serie que habían comenzado se ve suspendida a la mitad. Esto se traduce en una cantidad de dinero invertido en un producto finalmente truncado. Además, muchos lanzamientos requieren que el consumidor posea todas las entregas para completar el producto", relatan.
Para evitar llevarse sustos con el precio total, es conveniente calcular el precio del producto final, sumando todos los fascículos porque, en muchos casos, adquirirlo en una tienda especializada puede suponer un ahorro de más del 70%, según los datos de los que dispone Asescon; "tal es el caso de las maquetas o cursos de idiomas, diseño, dibujo, informática, etc.".
En cualquier caso, la empresa que publica la colección está obligada a suministrarla hasta el final a quien lo requiera. Además, una vez iniciada la colección, se puede solicitar hasta el último ejemplar, aunque haya sido retirada del mercado por una escasa demanda.
Derecho a recibir la colección completa
La mejor opción que se puede tomar a la hora de adquirir un producto de estas características es la información, tal como recuerdan los expertos de esta asociación. Y es fundamental conocer bien aspectos como el número de entregas o el precio de estas.
Del mismo modo, los consumidores han de saber que tiene derecho a recibir la colección completa, aunque esta sea retirada de los puntos de venta.
Es también muy práctico y revelador comparar el precio final de la colección al adquirirla por entregas o en su conjunto en una tienda especializada. "La diferencia del precio final puede sorprendernos, y no siempre de manera agradable", avisa Asescon.
