Laurel, pimienta, cerveza y por supuesto un buen pulpo, son los ingredientes de este plato, muy tradicional en la Región de Murcia. Una delicatesen de lo más murciano, que se puede tomar como picoteo, en una comida a base de tapas con familia o amigos, pero también como plato principal.
Para hacer esta receta, debemos contar con un pulpo de buen tamaño crudo. Ni cocido ni partido, lo más importante es que esté crudo y entero. Lo podemos comprar fresco o congelado, eso no importa. Aunque en este último caso debemos descongelarlo lentamente dentro de la nevera, el día anterior.
Colocamos el pulpo bien extendido en una bandeja o fuente apta para el horno.
Ponemos las hojas de laurel por encima, bien repartidas. Podemos ponerlas enteras o partidas por la mitad, para repartirlas más.
Añadimos también el puñado de granos de pimienta.
Regamos con la cerveza y llevamos al horno, que ya debe estar precalentado a 180°C y cocinamos durante dos horas. Eso sí, cada media hora, abrimos el horno para regar el pulpo con su caldo y que no haya partes que se queden resecan.
Una vez que haya pasado el tiempo, saca el pulpo del horno y trocéalo. Emplátalo, pon una pizca de sal y riégalo con su jugo. Añade un chorrito de limón recién exprimido y sirve inmediatamente.
