5 cosas que debes saber antes de jubilarte

La jubilación da comienzo a una etapa vital que marca el fin de la carrera profesional y el inicio de un periodo lleno de posibilidades y retos. Para muchos y muchas, representa una oportunidad de dedicarse a pasatiempos, viajar y disfrutar después de años de trabajo; unos años que, en ocasiones, no ofrecen el suficiente tiempo libre para ello. Sin embargo, abandonar el mundo laboral también plantea desafíos, como la necesidad de contar con una planificación financiera y preparación mental previas.

Por ello, en el siguiente artículo te presentamos las cinco cosas que debes saber antes de jubilarte, para así poder sacar el máximo partido a este momento vital lleno de experiencias gratificantes.

¿Qué supone la jubilación para una persona?

Pocas dudas caben acerca de lo que supone la jubilación para una persona que recién abandona el mundo laboral. Se trata, pues, de un cambio en el ciclo vital que ofrece la oportunidad de reflexionar y adaptarse a las experiencias venideras.

Así y todo, "cualquier cambio de ciclo vital supone un momento de crisis", señala la psicóloga María Gutiérrez Raposo. Y es que entrar en la jubilación da pie a la aparición de miedos (a envejecer, a enfermar, a fallecer), frustraciones, soledad, alegrías y tristezas... Aspectos en los que la cultura, el momento histórico y el género influyen para hacer del proceso de envejecer algo individual y diferente en cada persona.

Pero, pese a ser un momento particular de cada persona, la jubilación trae consigo cambios en los que, a su vez, intervienen diferentes fases. Gutiérrez los enumera de la siguiente forma:

1. Despedida laboral: suele haber rituales de despedida vinculados a este momento: comidas, cenas, fiestas, celebraciones, regalos…
2. Fase de luna de miel: en la que prima la sensación de libertad, poder y control del tiempo de uno mismo.
3. Fase de desencanto: pasado un tiempo, se pueden echar de menos rutinas del día a día cuando se trabajaba, la parte social de las relaciones laborales, el sentimiento de “utilidad” que proporcionaba el trabajo a la autoestima de cada persona.
4. Fase de reconstrucción y construcción del 'yo': ¿cuáles van a ser mis propósitos y objetivos en la vida a partir de este momento?, ¿qué deseos, motivaciones, necesidades tengo?, ¿qué me sigue dando valor y haciendo sentir bien a pesar de que ya no estoy trabajando?

Partiendo de estas fases, "hay personas que se despiden de la etapa laboral sin mucho sufrimiento y otros que enfrentarán la angustia de la pérdida de la vida anterior", apunta la experta. Esto hace de la jubilación un momento ilusionante a la par que una época de duelo.

La angustia derivada de la jubilación

Gutiérrez describe la angustia como la respuesta física y corporal del cuerpo para avisar de que algo pasa y no va bien. Cuando se siente angustia, lo importante es saber de dónde procede y cómo tratarla. "Muchas personas temen sentir su cuerpo y sentir angustia porque no saben manejarla ni descifrarla. Se puede trabajar para perder el miedo a las señales corporales que nos manda el cuerpo y lo más importante es poder buscar el correlato emocional: traducir la señal física en la emoción subyacente para poder entenderla y darle salida", expone la psicóloga.

Así pues, la clave para trabajar con ello es analizar cómo la persona ha gestionado otros momentos de angustia pasadas y cómo se lleva con sus emociones, es decir, "si ha aprendido a identificarlas, expresarlas, darles salida, manejarlas, aceptarlas y no rechazarlas ni luchar con ellas. Y si no se ha trabajado antes sobre ello, nunca es tarde para aprender a lidiar con las emociones de uno", añade Gutiérrez.

5 cosas que debes saber antes de jubilarte

Partiendo de lo recientemente expuesto, la experta en Psicología enumera una serie de aspectos que se deben conocer antes de proceder con la jubilación. Son los siguientes:

1. Es un momento muy bonito para poder pararse a conocerse a sí mismo o misma, revisar deseos y necesidades, poder seguir disfrutando de aquello que nos satisface. Y si alguien no ha podido llegar a saber qué es lo que le gusta, lo que necesita o motiva, puede empezar a hacerlo y descubrirlo. 
2. Reflexionar sobre lo anterior permitirá saber qué estilo de vida va a querer llevar uno o una y es un momento para el autocuidado de áreas tan importantes como la alimentación, el sueño, el ejercicio físico, las relaciones sociales y familiares…
3. Tener una mirada cariñosa, comprensiva hacia uno mismo o misma también será una gran compañera de viaje en estos momentos. 
4. Rodearse de una buena red social de apoyo también es otro de los puntos imprescindibles en esta etapa. Fortalecer interacciones sociales, espacios de compartir y expresar pensamientos y emociones.
5. Por último, dedicar todo el tiempo que haga falta a descubrir qué pasiones se tienen, qué interesa, qué ilusiona, qué hace feliz… ya que es momento de poder trabajar en ello.

En definitiva, convivir con el equilibrio del disfrute y de la aceptación de lo que va cambiando y a lo que hay que ir adaptándose.