La Sala de lo Social del Tribunal Supremo ha decretado como firme una sentencia que definía como procedente el despido por falta muy grave de un trabajador por parte de la compañía Endesa al que le fue concedida una excedencia para atender y cuidar de su abuela enferma a la que, como se acreditó durante el proceso, en cinco meses solo fue a verla un día a la residencia en la que residía en Gran Canaria a la que sin embargo, sí acudía a diario la madre del demandado.
Esta sentencia del Alto Tribunal viene a ratificar la ya dictada en mayo de 2019 por el Juzgado de lo Social número 4 de Las Palmas de Gran Canaria a favor de Endesa, la empresa en la que trabajaba el empleado despedido, según este dictamen de manera procedente.
El trabajador prestaba sus servicios en la compañía desde 1990 y lo hizo hasta que en octubre de 2018 se le notificó su despido por falta muy grave.
El posteriormente despedido trabajador solicitó una excedencia de tres meses, que se le concedió, para poder cuidar de su abuela en mayo de 2018 y que en julio de aquel mismo año pidió, y consiguió, que le fuese prorrogada durante 15 meses más.
La realidad era que su abuela estaba al cuidado de su madre y del personal de la residencia de mayores en la que estuvo ingresada de junio a noviembre de 2018.
"El actor solo fue a visitar a su abuela un día, el 16 de julio de 2018", se explica en la sentencia que ahora ratifica el Supremo y en la que se exponía que quedó "demostrado que a pesar de haber solicitado el actor de la empresa una excedencia por cuidado de su abuela, realmente la finalidad de la misma no era para tales cuidados", sino para "tareas que nada tenían que ver", lo que supone "una infracción muy grave" y, por consiguiente justifica "la decisión disciplinaria de despido tomada por la empresa".
