El glaucoma, la segunda causa de ceguera evitable: estos son los factores de riesgo

Según la Asociación Mundial del Glaucoma, esta enfermedad es la segunda causa de ceguera a nivel mundial. Se estima que un 2% de la población de 40 años tiene glaucoma y, en el caso de los mayores de 80 años, afecta a uno de cada ocho.

Esta enfermedad asintomática, que es padecida por 90 millones de personas en el mundo, no suele detectarse hasta que es demasiado tarde. Este problema se agrava en los países subdesarrollados, donde el 90% desarrolla la enfermedad en silencio y no la detecta hasta que la pérdida de visión es irreversible.

Con el objetivo de concienciar sobre esta enfermedad, el Servicio de la Oftalmología-Admiravisión del Hospital Sanitas CIMA ha celebrado la sexta edición de la Semana Mundial del Glaucoma entre el 13 y 17 de marzo, donde ha llevado a cabo una campaña de medición gratuita de la presión intraocular.

Factores de riesgo

Aunque no existen síntomas previos, hay algunos factores que elevan el riesgo de padecer la enfermedad.

• Edad avanzada 
• Antecedentes familiares de glaucoma
• Presión intraocular elevada
• Utilización de corticoides
• Traumatismos oculares
• Otras patologías oftalmológicas que pueden predisponer a la persona a sufrir esta enfermedad

La presión intraocular elevada es el único factor sobre el que se puede actuar en la actualidad. Si se detecta pronto, puede implementarse un plan de tratamiento que ralentice la progresión de la enfermedad.

“Para conseguir detener o ralentizar el avance del glaucoma es preciso establecer un valor para la presión intraocular de cada paciente. Este valor individual es el que debemos tratar de conseguir para detener la progresión de la enfermedad. Hay distintas opciones, como el empleo de colirios, la colocación de válvulas especiales, el tratamiento con láser Argón y otros abordajes para casos más complejos, como la cirugía, que será más o menos invasiva en función de la situación del paciente y el grado de avance de la enfermedad”, ha señalado la Dra. Valeria Opazo, experta en glaucoma del Hospital Sanitas CIMA. 

Estudio diagnóstico completo 

Para diagnosticar el glaucoma, se necesita estudiar detenidamente la forma y color del nervio óptico, el campo visual completo, el espesor corneal y, sobre todo, conocer y ver la evolución de la presión intraocular. Para esto, se utilizan diferentes equipos tecnológicos como tonómetros, campímetros, gonioscopios, paquímetros o tomógrafos de coherencia óptica. Según la Dra. Opazo, “cuanto antes se diagnostique la enfermedad, menos visión se perderá y tendremos mayores probabilidades de controlarla correctamente”.