La musicoterapia tiene cada vez más éxito entre los cuidados paliativos

Para aquellas personas con un avanzado deterioro de salud, la musicoterapia ha demostrado ser una tratamiento complementario con resultados satisfactorios para el paciente y su entorno. 

¿En qué consiste la musicoterapia?

Se trata de un tratamiento que, pese a no ser curativo, ha reportado tener múltiples beneficios a nivel físico, emocional y sociofamiliar. La música estimula diferentes áreas del cerebro del paciente, logrando disminuir los niveles de ansiedad, prolongar la relajación e incluso mejorar las habilidades psicomotrices. 

Por lo general, la musicoterapia se lleva a cabo en sesiones periódicas impartidas por un profesional (sanitario, educativo, musical) a un paciente o grupo de pacientes.

De las residencias a los hospitales

Aunque ha sido más frecuente su uso en residencias, cada vez más hospitales incluyen la musicoterapia para mejorar la calidad asistencial en las últimas etapas de la vida. El último ha sido el Hospital de Calella que, desde el pasado mes de abril, ofrece este servicio a los pacientes ingresados ​​en la Unidad de Paliativos y de Larga Estancia, como indicaba el centro a través de una nota de prensa. 

 

 

 

La musicoterapia es una forma de trabajar las emociones con las personas. Y es que la música tiene un lenguaje propio y único, por eso, es capaz de abrir y llegar a lugares y estados a los que, de otra manera, costaría mucho o directamente, no se podría llegar.

Las sesiones, que se llevan a cabo una vez por semana por parte de una musicoterapeuta profesional, están dirigidas tanto a pacientes como a familiares. Cada una está preparada específicamente en función del paciente teniendo en cuenta su estado.

Durante el rato que dura la actividad, la musicoterapeuta, con la ayuda de diferentes instrumentos, acompaña al enfermo y a sus familiares con notas que tienen un significado para ellos.

De esta forma se facilita el acceso a rincones personales y recuerdos que inciden positivamente en su bienestar físico y emocional. Hasta el momento, estas sesiones de musicoterapia están teniendo muy buena acogida, tanto por parte de pacientes como de familiares.

Se trata de una nueva actividad que se ha podido poner en marcha, gracias al convenio firmado entre la Corporación de Salud del Maresme y la Selva y Servicios Funerarios Cabré y Junqueras, que financia la actividad, y en la colaboración del Asociación de Voluntarios y Amigos del Hospital (AVAH), quien ha realizado la donación de un teclado al centro para poder complementar la actividad.