Un hombre de 54 años murió este pasado domingo tras ser arrollado en la carretera de circunvalación de Granada. El trágico siniestro fue provocado por un conductor de 53 años que iba de camino, precisamente, a un juicio rápido por haber superado la tasa de alcoholemia apenas 24 horas antes. En esta ocasión, cuando atropelló al motorista, también había bebido.
La gravedad de los hechos, informa ABC, ha llevado al Juzgado de Guardia este fin de semana a ordenar directamente su ingreso en prisión. Primero por un presunto homicidio imprudente, además de las dos infracciones por conducir bajo los efectos del alcohol, tanto el sábado como el domingo.
Concretamente, según el atestado policial, el grado de alcoholemia del conductor llegaba hasta los más de un miligramo por litro en sangre, lo que equivale a media docena de combinados de alcohol con alta graduación. Conduciendo en este estado, embistió por detrás a la moto del fallecido que cayó al asfalto y murió prácticamente en el acto, quedando atrapado en los bajos de su automóvil.
El percance letal sucedió a la altura del PTS y el Centro Comercial Nevada. Fue poco antes de las nueve y media de la mañana de este pasado domingo. Efectivos del 061 se trasladaron de inmediato hasta el lugar de la desgracia, pero no pudieron salvar la vida del motociclista. Ocurría apenas llegadas las nueve y media de la mañana cuando el hombre se dirigía ebrio hacia los mismos juzgados de Caleta, en la capital granadina. Es decir, se iba a presentar en ese estado en el propio juicio rápido a celebrar.
Poco después de que le dieran el alto por conducir embriagado el sábado y le imputasen el presunto delito por el que debería comparecer ante el juez, volvió a consumir una ingente cantidad de alcohol que finalmente acabó con la vida de un hombre.
El Juzgado de Guardia ha ordenado el ingreso en prisión del detenido por la presunta comisión de un delito de homicidio imprudente y dos de conducción bajo los efectos del alcohol, el registrado el domingo y el del sábado.
