Los consejos de la DGT para evitar que se forme hielo en el parabrisas del coche

El frío ya ha llegado y con él las heladas y las nevadas pasarán a formar parte del día a día de muchas zonas de España durante unos meses. Además de preparar nuestra casa y abrigarnos estos días de temperaturas más bajas, es importante que vigilemos también el estado de nuestro vehículo.

Como viene siendo habitual, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha compartido una serie de recomendaciones en su revista oficial para saber qué hay que hacer para evitar que el parabrisas se llene de hielo y, en caso de no poder evitarlo, qué no debemos hacer.

Si el coche pasa las noches a la intemperie, la medida más sencilla y limpia para evitar un parabrisas helado por la mañana es cubrir el cristal. Utiliza un cartón o una manta para cubrir el cristal. Puedes mantener este material sujeto utilizando las puertas delanteras o los brazos de los limpiaparabrisas.

De esta manera, se evita que la luna se cubra de hielo y que las escobillas se queden pegadas al cristal.

Cómo eliminar el hielo: paso a paso

Si una capa de hielo ya ha cubierto el cristal, debes proceder de la siguiente manera:

1. Arranca el motor y presiona el botón de desempañar la luna delantera (y trasera, si es necesario). El ventilador dirigirá el aire hacia el parabrisas. Es crucial regular la temperatura para evitar un cambio de temperatura directo al cristal.

2. Utiliza un producto descongelante (existen varios en el mercado). Si la capa de hielo no es muy gruesa, puede rociar el parabrisas con alcohol. Si la capa es gruesa, será necesario emplear una rasqueta.

3. Rasca el hielo adherido al cristal con una rasqueta de plástico. Si no dispone de una rasqueta de plástico, puede usar una tarjeta o un carné de plástico.

Después de haber quitado el hielo y despegado las escobillas del cristal, accione el limpiaparabrisas para dejar la luna limpia (y asegúrese de que ya no hiela).

Además, la DGT aconseja retirar también el hielo de los faros. En los coches con faros halógenos, encender las luces durante un tiempo debería ser suficiente. Sin embargo, las tecnologías de iluminación modernas o los halógenos con diseños que separan la parábola del cristal protector requieren que retire el hielo a mano.

Asegúrate de que las escobillas estén siempre en buen estado para un barrido perfecto.

Rellena el depósito del limpiaparabrisas con líquido limpiador que contenga anticongelante, lo cual previene que los manguitos se obstruyan con las bajas temperaturas.

Lo que nunca se debe hacer

La DGT enfatiza varias acciones que se tienen que evitar por completo, ya que pueden empeorar la situación o dañar el vehículo:

1. No acciones los limpiaparabrisas ni eche agua antes de quitar el hielo, ya que esto empeorará la situación y las escobillas pueden quedar pegadas al cristal.

2. Nunca uses instrumentos metálicos ni de otros materiales que puedan arañar el cristal para raspar el hielo.

3. No eches agua muy caliente o ponga la calefacción a una temperatura muy elevada, ya que el cambio brusco de temperatura puede dañar el cristal.

4. No eches sal, ya que la sal evita la congelación, pero no descongela. Además, puede arañar el cristal y corroer la chapa (carrocería).

5. No empieces a circular con el hielo aún pegado en el parabrisas. La falta de visibilidad puede provocar situaciones peligrosas, incluso si es solo durante unos metros, mientras espera que la calefacción y los limpiaparabrisas terminen de derretirlo.