El fotoperiodista Gervasio Sánchez muestra las secuelas de las víctimas mutiladas por minas antipersona y recorre sus historias de supervivencia en el libro Vides Minades. 25 anys tras un cuarto de siglo retratando las consecuencias de esta lacra en conflictos bélicos de todo el mundo.
Sánchez ha explicado en rueda de prensa en Barcelona que "todos los protagonistas de este proyecto han sido heridos por minas durante las posguerras" porque, una vez firmados los tratados de paz que acaban con el conflicto bélico, estos artefactos permanecen enterrados al acecho de civiles que retoman sus vidas.
Se trata de un proyecto de 25 años en países como Angola, Mozambique, Camboya, Afganistán, Irak, El Salvador, Nicaragua, Colombia y Bosnia y Herzegovina, entre otros, donde Sánchez ha retratado las consecuencias de por vida que dejan las minas antipersona.
En Vides Minades. 25 anys vuelca los testimonios de seis víctimas y sus historias de vida desde el impacto de la explosión hasta la actualidad, historias de superación de las que el fotoperiodista ha remarcado su "fuerza" inquebrantable para seguir hacia adelante.
Son Manuel Orellana, de El Salvador; y Sofia Elface, de Mozambique; ambos presentes durante la rueda de prensa, y de Medy Ewaz, de Afganistán; Adis Smajic, de Bosnia y Herzegovina; Sokheurm Man, de Camboya, y Mónica Paola, de Colombia, todos víctimas de una mina antipersona.
"¿Quién paga la cuenta?"
Sánchez muestra en el libro cómo les afectan las heridas de por vida que les han dejado las minas antipersona, las veces que tienen que cambiar de prótesis, el coste de las numerosas operaciones, los efectos psicológicos del impacto, las dificultades para mejorar y también la felicidad por los retos que superan.
"¿Quién paga la cuenta?", se ha cuestionado el autor sobre el coste que supone para estas personas el haber sido víctima de una mina antipersona y ha defendido que quienes deberían financiar las intervenciones quirúrgicas y las prótesis son las empresas armamentísticas y los bancos que las financian.
Ley de control de armas
Sánchez ha lamentado que las minas antipersona siguen vigentes hoy en día pese a que en 1997 un total de 164 países firmaran el tratado de Ottawa para poner fin a su empleo y producción, un acuerdo en el que no figuran ni Estados Unidos, China, Rusia y la India, que según él disponen de un gran arsenal de estos artefactos.
De hecho, ha asegurado que los firmantes "no lo hicieron por motivos humanitarios", sino porque otros países las fabricaban mucho más baratas, como India y China, y también ha criticado la política armamentística de España pese a la ley de control de armas.
Para Sánchez esta norma es una tomadura de pelo porque se "viola permanentemente": ha acusado al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero de multiplicar por seis el presupuesto en Defensa y lo ha tachado textualmente de ser el mayor traficante de armas.
También ha ironizado con que el Gobierno "más izquierdista de la historia", en alusión a la coalición de PSOE y Unidas Podemos del Gobierno en funciones de Pedro Sánchez, también haya aumentado el presupuesto en Defensa.
Ucrania
Sobre la guerra en Ucrania, Sánchez ha advertido de las consecuencias que puede haber cuando acabe el conflicto en un país que, según él, está todo lleno de minas: "Que se vayan preparando los ucranianos", ha lamentado el autor.
Ha asegurado que tanto Rusia como Ucrania colocan estos artefactos y ha criticado la "corrupción" que existe tanto en el Gobierno de Vladímir Putin como en el de Volodímir Zelenski.
