Descubre los beneficios de la vinoterapia sobre el cuidado de la piel

Para aquellos que todavía no lo conozcan, la vinoterapia es un tratamiento de belleza que recurre a las propiedades antioxidantes del vino y la uva para cuidar el estado de la piel y el bienestar del individuo. Recordemos que dicha fruta posee una gran cantidad de flavonoides y resveratrol, dos sustancias que luchan contra la acción de los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro. Un efecto que se multiplica gracias a la presencia de las vitaminas C y E en su composición.

Por estos y otros muchos motivos, los principios activos del vino se han convertido en ingredientes indispensables dentro del ámbito de la cosmética. Así, en 1999, Matilde Cathiard y Bertrand Thomas fundaron en Burdeos el primer spa con tratamientos exclusivos de vinoterapia. Una tendencia que años después se ha extendido al resto del mundo. Bajo esta premisa, ¿qué beneficios aporta la vinoterapia a nuestro organismo?

Un método rejuvenecedor y reafirmante

Puedes recurrir a este tipo de tratamiento a nivel facial a través de mascarillas, exfoliaciones o limpiezas de cutis; a nivel corporal con hidromasajes o envolturas de sudación, o mediante el uso de aparatología estética, que consigue un efecto similar a los peelings dermatológicos. ¿Qué consigues con esta terapia?

• Además de proteger la piel de los radicales libres y los signos del envejecimiento, su riqueza de antioxidantes favorece la producción de elastina y colágeno, que se traduce en una elasticidad adicional.

• La hidratación es otro de sus puntos fuertes, pues lo hace en profundidad aportando mayor luminosidad y energía a la piel.

• Si se aplica exclusivamente en las extremidades inferiores, la vinoterapia también puede ayudar a mejorar la circulación, aliviar las varices y evitar las piernas cansadas.

• Al ser un producto con propiedades desintoxicantes, la aplicación de ungüentos con principios activos del vino puede eliminar las toxinas de la piel procedentes del exceso de sol o la contaminación medioambiental, por ejemplo.

• Las mascarillas que contienen los taninos del vino son famosas por favorecer la regeneración de las articulaciones y los músculos, además de actuar como fuente de energía. Gracias a esta cualidad, la vinoterapia es una gran aliada para aquellas personas propensas a los calambres musculares.

• Entre los vinos que se emplean en dicha técnica, el Cabernet y el Merlot son muy útiles para limpiar el rostro y eliminar las células muertas de la piel debido a su capacidad exfoliante.