Hojas de ginkgo: ¿realmente mejoran los trastornos circulatorios de la edad?

En España es todavía un alimento desconocido, sin embargo, en otros puntos del globo es uno de los bocados más apreciados debido a sus supuestas propiedades nutricionales. El árbol Ginkgo Biloba, del que procede, es también muy especial, pues es el único en todo el mundo que no tiene parientes vivos. Sin embargo, su popularidad, especialmente en Japón y otros países asiáticos, se debe a que sus hojas se utilizan desde tiempos inmemoriales como remedio para ralentizar o favorecer los efectos del envejecimientos, siendo considerado un auténtico elixir de la longevidad.

Y no solo eso, algunas personas también aseguran que las hojas de ginkgo tienen un efecto "milagroso" sobre los vértigos y los mareos, la demencia, los problemas de visión, la ansiedad, el síndrome premenstrual y, sobre todo, la sangre y su circulación, especialmente en las personas mayores. Pero, ¿estamos realmente ante un ingrediente de semejante potencial?

La ciencia no avala, por el momento, sus efectos

Tal ha sido el revuelo que las hojas de ginkgo han causado en la sociedad, que la comunidad científica no ha tardado en estudiar y verificar sus propiedades. Es cierto que algunos estudios encuentran relación entre el consumo de dicho ingrediente y trastornos como la ansiedad o la demencia, como consecuencia de la estimulación del riego sanguíneo.

No obstante, también hay trabajos que apuntan hacia el lado contrario y alertan a los consumidores de la "limitación" de su alcance. Publicaciones de la talla de Neurology, The Lancet o JAMA Network han sacado a la luz investigaciones que aseguran que la ingesta habitual de ginkgo no tiene ningún impacto en las capacidades físicas y cognitivas asociadas a la edad.

Eso sí, esto no significa que sea un alimento perjudicial para la salud, simplemente es posible que no cumpla los beneficios que han encumbrado su figura pues, por el momento, la comunidad científica no se pone de acuerdo con sus propiedades para la salud. 

Contraindicaciones

Lo que sí se sabe a ciencia cierta, como ocurre con el resto de alimentos que componen nuestra despensa, son las contraindicaciones de su consumo. Así, las hojas de ginkgo no son recomedables para las mujeres embarazadas, los pacientes con sangrado frecuente o ataques epilépticos, o aquellos que toman fármacos anticoagulantes, medicinas hepáticas o fluidificadores de la sangre. Ante esta situación, lo mejor es que consultes a tu médico antes de introducir el ginkgo en tu alimentación.