¿Cómo desmaquillarse correctamente? ¿Toallitas de usar y tirar o algodón?

Limpiar nuestra piel a diario es fundamental para que esta luzca radiante. Pero, realizar una buena limpieza es más complejo de lo que creemos y existen diferentes métodos para ello. De nada sirve aplicarnos una buena crema si nuestro rostro no está realmente limpio, de ahí la importancia de utilizar los productos y accesorios adecuados.

¿Cuántas veces te desmaquillas al día?

Es fundamental empezar por esta pregunta. Si has contestado una vez al día, tenemos que decirte que tu respuesta es incorrecta.

Deberías hacerlo dos veces al día, una por la noche para desmaquillarnos y quitar todas las impurezas de la piel, y otra por la mañana al despertarnos para eliminar las secreciones que produce la propia piel al regenerarse durante las horas de sueño.

¿Con qué debemos limpiar nuestra piel?

Lo cierto es que, nuestro ritmo diario hace que cada vez tengamos menos horas al día para nuestros mimos y cuidados de belleza. Por ello, a la hora de desmaquillarnos, las marcas han pensado en ello y son cada vez más los productos que lanzan al mercado para ayudarnos a ahorrar tiempo y ganar en comodidad, tales como las toallitas desmaquillantes.

Los expertos señalan que no debemos abusar de este tipo de producto, ya que no limpian en profundidad e incluso, dependiendo de las marcas, pueden contener algunos activos astringentes para la piel. No obstante, pueden ser una buena opción como primer paso para desmaquillarnos y a continuación utilizar otro método de limpieza más profundo.

La composición de muchas ellas puede generar algunas alergias o provocar sequedad e irritación en la piel. Por ello, si prefieres utilizar este sistema de desmaquillante es fundamental que aclares la piel con agua después de su uso.

El uso del algodón para la limpieza facial es uno de los productos más recomendados, especialmente para las personas con la piel sensible, ya que son de gran suavidad. Además, el algodón es muy higiénico frente a otros sistemas como pueden ser las manoplas o las toallas, las cuales, o se limpian y desinfectan a diario, o podrían ser contraproducentes para nuestra piel al poder generar bacterias. Además, el uso de toallas o manoplas podrían irritar la piel en aquellas personas con sensibilidad debido al efecto de la frotación.

Por todo ello, sin duda, el uso de la leche limpiadora con algodones, siempre de buena calidad para no dañar nuestro rostro, es una de las opciones más delicadas. Eso sí, si lo tuyo es cuestión de pereza, mejor una toallita que acostarnos sin desmaquillar.

Recuerda finalizar tu ritual de limpieza con un bueno tónico que aporte a la piel sustancias calmantes e hidratantes.