El método para dormir bien las noches de mucho calor

Cuando suben las temperaturas cuesta conciliar el sueño, se está incómodo en la cama por el sudor, por los nervios, especialmente si hay que madrugar, y por el no poder dormir a pesar de tener sueño.

Según los expertos y los modelos meteorológicos, este verano será uno de los más cálidos y secos, con temperaturas superiores a lo normal, por lo que es necesario preparar la habitación para que irse a dormir no se convierta en una pesadilla.

Y es que dormir con calor es muy difícil, pero poner el aire acondicionado toda la noche tampoco es la mejor solución, ni por la factura de la luz, ni por un tema de salud y vías respiratorias.

Para conseguir conciliar el sueño y dormir más o menos fresco puedes llevar a la práctica el método egipcio, una curiosa y sencilla manera de bajar la temperatura del cuerpo al meterte en la cama. Te explicamos esta técnicas y algunos consejos más.

El método egipcio

Si te desespera dormir con calor prueba con esta técnica. La clave está en utilizar sábanas húmedas y frías en la cama, de manera que el frescor te permita relajarte y bajar la temperatura del cuerpo. Puedes seguir estos pasos:

• Saca las sábanas y ponlas bajo el grifo de agua fría.

• Escúrrelas bien para que no empapen el colchón. Si quieres puedes centrifugarlas.

• Puedes ponerlas un rato en la nevera para bajar aún más la temperatura.

• Haz la cama con las sábanas mojadas y disfruta del frescor. Por la mañana las sábanas estarán secas.

Si no quieres utilizar las sábanas, otra opción es usar toallas húmedas o trapos para aplicar en determinadas zonas del cuerpo más sensibles al calor como tobillos, muñecas, cuello y frente.

Además, si colocas un ventilador enfocando a la cama podrás aumentar la sensación de frescor. No lo tengas toda la noche, solo el tiempo justo para conciliar el sueño. Para ello utiliza el temporizador que disponen algunos ventiladores o hazte con un enchufe temporizador.

Otros consejos

​

• Evita que entre el calor: Para dormir bien, lo ideal es poder mantener la habitación a una temperatura de entre 18 y 22 grados. Mantener las ventanas cerradas y las persianas bajadas durante el día evitará que entre el calor. Cuando se ponga el sol o a primera hora de la mañana sube las persianas y abre las ventanas creando un poco de corriente de aire.

• El colchón y las sábanas: En el mercado existen colchones que ayudan a gestionar el calor, son aquellos que tienen una primera capa de material transpirable y que evitan que el calor que desprendemos nos retorne. Si nuestro colchón no gestiona el calor, el efecto transpirable también podemos conseguirlo con una funda o protector de colchón. Para las sábanas, el algodón y el lino son los mejores tejidos.

• Pijama y camisón: Lo mejor es dormir tal como vivimos al mundo, pero para algunas personas puede resultar algo incómodo y necesitan de un pijama o un camisón. En tal caso hay que decantarse por piezas ligeras, de algodón u otros tejidos que sean suaves, que no queden ceñidos al cuerpo, evitando gomas que puedan presionar alguna zona.

• Una ducha: Una ducha con agua tibia antes de ir a dormir te quietará el calor y sudor acumulados durante el día. Es importante que el agua sea tibia porque si usas agua fría, al salir de la ducha notarás demasiado calor.