
Ya se puede hacer un diagnóstico preciso y rápido de artritis en solo 10 minutos
Una tecnología permite su detección utilizando el líquido sinovial de las articulaciones

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La artritis representa un importante problema de salud pública, que afecta a aproximadamente 595 millones de personas (7,6% de la población mundial) y contribuye significativamente al deterioro de la calidad de vida en la edad adulta. como documenta un estudio en ‘Lancet Rheumatology’.
La osteoartritis (OA) y la artritis reumatoide (AR), los dos tipos más comunes de artritis, a menudo se consideran pertenecientes a la misma categoría de enfermedades, ya que ambas afecciones implican dolor e inflamación en las articulaciones.
Sin embargo, ambas patologías presentan una fisiopatología, síntomas, causas subyacentes y modalidades terapéuticas distintas, como demuestran algunas investigaciones, como demuestran algunas investigaciones. Hasta la fecha, el diagnóstico de la artritis sigue siendo un desafío debido a la falta de una única prueba definitiva. El diagnóstico de la OA actualmente utiliza una combinación de enfoques basados en cuestionarios para evaluar los síntomas clínicos y pruebas de imagen, que incluyen radiografías, ecografías y resonancias magnéticas, como se documenta en 'Annals of Translational Medicine'.
Biopsia líquida
.Mientras tanto, el enfoque diagnóstico para la AR también requiere pruebas de laboratorio como análisis de muestras de sangre. Si bien los métodos de biopsia líquida suelen demostrar una sensibilidad y especificidad clínicas del 70% al 80%, presentan limitaciones para discriminar a los pacientes en fases tempranas de la enfermedad. A pesar de estos enfoques, la sutileza de los síntomas iniciales y la superposición de criterios diagnósticos dificultan la distinción entre OA y AR. Además, algunos pacientes pueden tener dificultades para determinar si su dolor se debe a procesos inflamatorios o deformidades articulares estructurales. Por lo tanto, distinguir con precisión entre el dolor causado por la inflamación sinovial activa, característica de las enfermedades reumáticas, y el dolor resultante del estrés mecánico y la degeneración del cartílago es crucial para optimizar las estrategias de tratamiento y monitorear la progresión de la artritis.
Nueva prueba
Sin embargo, el Dr. Ho Sang Jung y su equipo de investigación de la División de Investigación de Materiales Biosanitarios Avanzados del Instituto Coreano de Ciencia de Materiales (KIMS) , en colaboración con el Hospital St. Mary's de Seúl, han desarrollado una tecnología que permite el diagnóstico de osteoartritis y artritis reumatoide en 10 minutos mediante líquido sinovial, como demuestra un nuevo estudio de 'Small'.

Las articulaciones humanas contienen un líquido conocido como líquido sinovial. El equipo de investigación se centró en las diferencias en la composición de los metabolitos (subproductos de los procesos químicos que ocurren en el cuerpo) presentes en este líquido.
Mediante el análisis de estas diferencias metabólicas, desarrollaron una tecnología capaz de distinguir entre la osteoartritis y la artritis reumatoide en 10 minutos, además de evaluar la gravedad de esta última. El equipo de investigación utilizó la tecnología de Dispersión Raman Mejorada por Superficie (SERS), un fenómeno en el que las señales ópticas de las moléculas se amplifican varios millones de veces. Esta tecnología amplifica las señales de las moléculas traza presentes en el líquido sinovial y, mediante una combinación de análisis basado en Inteligencia Artificial y algoritmos matemáticos, detecta las sustancias diminutas responsables de la artritis.
Además, desarrollaron un método de diagnóstico sencillo y rápido mediante un sensor compuesto por una nanoestructura de oro con forma de erizo de mar, formada sobre una superficie de papel con alta absorción de humedad, lo que permite una detección eficiente a través de fluidos corporales.
En colaboración con el Hospital St. Mary's de Seúl, el equipo de investigación realizó pruebas con esta tecnología en 120 pacientes. Los resultados mostraron que la osteoartritis y la artritis reumatoide se podían diagnosticar y distinguir con una precisión superior al 94%. Además, la tecnología alcanzó una precisión superior al 95% al determinar la gravedad de la artritis reumatoide.
Estos hallazgos demuestran que la tecnología no solo reduce significativamente el tiempo y el coste del diagnóstico de la artritis, sino que también garantiza un alto nivel de precisión diagnóstica.
El Dr. Ho Sang Jung, investigador principal del KIMS, ha afirmado en un comunicado: "Si esta tecnología se comercializa, no solo facilitará el diagnóstico, sino que también será muy útil para monitorear el progreso del tratamiento. También planeamos seguir ampliando nuestra investigación para abarcar una gama más amplia de enfermedades en el futuro".