100 recetas de cine: desde la ratatouille a los tomates verdes fritos

Muchas de las películas y series más famosas de la historia del cine y la televisión llevan intrínsecas algunas comidas y bebidas icónicas que a cualquier aficionado del cine querría probar. Desde el traicionero gazpacho de Carmen Maura en 'Mujeres al borde de un ataque de nervios' hasta el Moloko plus, el cóctel de la violencia de 'La naranja mecánica'; pasando por la ratatouille o los tomates verdes fritos de sus películas homónimas y los cócteles neoyorquinos de 'Sexo en Nueva York'. 

Julio Le Marchand y María Victoria Hernández, apasionados del cine y la gastronomía, junto con la ilustradora Melissa Siles, recopilaron todas estas recetas emblemáticas en el libro 'Cocinando con palomitas: 100 recetas icónicas del cine y la televisión' (editorial Ondas del Espacio). Esta guía posibilita "aprender en sencillos pasos a preparar un dorayaki o las rosquillas de los Simpson, desayunar como Walter White o como en Dowton Abbey o degustar platos de importación desde México hasta Corea", destaca Le Marchand. 

El Comidista, Mikel López Iturriaga, declara que "es un completísimo compendio de platos que humean en nuestra memoria audiovisual". Destaca que "no se limita a los grandes éxitos cinematográficos o televisivos sino que incorpora un montón de delicias indies". Lo define como "un potaje casero" más que "un precocinado industrial". 

Mitos de la gastronomía

La tarta de cerezas de 'Twin Peaks', la de manzana de 'American Pie' o la de chocolate de 'Matilda', la cerveza de mantequilla de 'Harry Potter', el chapaguri de 'Parásitos', el suflé de 'Sabrina', el bacalao al pil pil de 'Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón', la Cangre-burger de 'Bob Esponja' o los espaguetis con albóndigas de 'El padrino' son algunas del centenar de platos que pueden cocinarse con este libro. 

El cine también genera mitos y hace lo mismo con la gastronomía de algunos países como Francia, Reino Unido o Grecia. También disipan imágenes que se han incrustado en la mente del público general, como que Audrey Hepburn desayunaba "un cruasán en lugar de un lazo de hojaldre" en 'Desayuno con diamantes'; o que "fue Sally y no Harry" en 'Cuando Harry encontró a Sally', "quien pidió el famoso sándwich de pastrami" con el que Meg Ryan fingió uno de los orgasmos más famosos del cine. 

Hay opciones vegetarianas, pero reales, no "como Ian en 'Mi gran boda griega' cuando su familia política le ofrece prepararle cordero tras enterarse de que no come carne". Opciones dulces, saladas, para pequeños y para mayores, de películas infantiles, de animación, invenciones de los directores -como la hamburguesa Big Kahuna de 'Pulp Fiction' que ideó Quentin Tarantino-, combinaciones imposibles... Todas estas recetas y más en un compendio para simular vivir en tu película favorita.