¿Codos ásperos y resecos? Apunta estos remedios para solucionarlo

No reparamos demasiado en ellos, pero unos codos que presenten la piel oscurecida, cuarteada, incluso con grietas, además de convertirse en un problema estético, puede resultar algo muy molesto en el momento de flexionarlos o apoyarlos.

La piel de nuestros codos puede presentar distintas anomalías, desde un tono más oscuro que el resto de la epidermis, hasta una sequedad extrema que llege incluso a provocar pequeñas heridas. En la mayoría de los casos, unos sencillos cuidados devolverán a los codos su buen aspecto pero, si notas que la piel presenta un grosor excesivo, no está de más consultarlo al dermatólogo, porque podría tratarse de un caso de hiperqueratosis que, tal como señala la Fundación Piel Sana podría requerir algún tratamiento específico, generalmente basado en la aplicación tópica de algún queratolítico (fármacos con propiedades que permiten disolver parcialmente la capa córnea de la piel).

Cómo devolver la suavidad a tus codos en casa

Si tus codos no presentan patología alguna, simplemente, los has descuidado un poco, ponte manos a la obra y devuélveles su buen aspecto.

En primer lugar, es importante exfoliar la piel de la zona, que suele ser una de las “grandes olvidadas” en las habituales rutina de belleza. Cualquier mascarilla exfoliante natural te puede valer, por ejemplo: una cucharada de aceite de oliva mezclada con azúcar. Aplica esta mezcla (o cualquier crema exfoliante corporal) en tus codos masajeándolos con tus dedos mientras haces círculos. Este gesto ayudará a desprender las pieles secas que se quedan acumuladas en la epidermis del codo. Pon en práctica esta medida una vez al mes y tus codos mejorarán en suavidad y aspecto de manera notable.

La hidratación y la nutrición son la segunda fase de tu particular tratamiento. La crema hidratante corporal de uso diario es perfecta para este fin, pero debes acordarte de incluir a tus codos cuando la apliques en todo el cuerpo. En caso de máxima sequedad, incluso de grietas, también tienes excelentes remedios caseros para mejorar la situación.

Aplicar unos algodones impregnados en miel justo en los codos, dejándolos actuar unos 10-15 minutos, es una excelente idea para aportar a su piel la hidratación y los nutrientes que requiere. Hacer lo mismo, pero con la aguacate triturado, alimento rico en vitamina E y otros antioxidantes, causará el mismo efecto.

Por último, si tu problema es el tono oscuro que parece no querer abandonar tus codos, el limón y su capacidad para aclarar la piel es tu mejor aliado. Frota los codos una vez por semana con la mitad de uno, deja que el zumo actúe unos minutos y, seguidamente, limpia con abundante agua. Pronto notarás los resultados.