¿En qué consiste una gastroscopia y cómo se realiza?

Ver cuál es la situación del esófago, estómago y duodeno. Ese es el objetivo por el que se realizan las gastroscopias. Una gastroscopia es una técnica de imagen que utiliza el equipo sanitario para explorar el tracto digestivo superior (en el cual se enmarcan las pares del cuerpo antes mencionadas), mediante la introducción via oral de un tubo flexible y delgado llamado Endoscopio. Éste incorpora una cámara en su extremo mediante el cual permite ver en tiempo real cómo están estas zonas.

Su indicación se restringe a pacientes con síntomas que hagan sospechar de enfermedades que se manifiestan mediante síntomas como la dificultad para tragar, un dolor abdominal persistente, pérdida de peso, ardores frecuentes o sangrados digestivos.

Gracias a esta técnica, se pueden detectar tumores en estadio precoz. Mediante la extracción de pequeñas muestras de mucosa, que posteriormente son estudiadas al microscopio, se puede hacer la distinción entre lesiones benignas y malignas.

Esta prueba no consiste solamente en la introducción de una cámara, sino que permite también incorporar una gran variedad de instrumentos a este tubo que permite hacer distintas acciones como la dilatación de zonas estrechas, extirpar pólipos, extraer cuerpos extraños o cerrar una hemorragia, por ejemplo. Unas acciones que permiten evitar o minimizar las veces que se necesitan las transfusiones o realizar otro tipo de cirugías.

Cómo se realiza la prueba

Como todas las pruebas que se realizan en el cuerpo humano en todo momento el paciente está acompañado del equipo médico, de modo que la seguridad está garantizada en todo el proceso, el cual dura entre 2 y 5 minutos.

El primer paso será colocar un protector en la dentadura antes de introducir el endoscopio en la boca. Existe la posibilidad de realizar la exploración con sedación o anestesia. Esta introducción no resulta dolorosa y no interfiere con el aparato respiratorio.

Una vez en el interior el equipo verá la parte alta del tracto digestivo y realizará las pruebas que considere. Como en todo proceso puede hacer alguna complicación: reacción alérgica, infección, pequeñas hemorragias, etc. pero son muy infrecuentes y aparecen en menos de 1 por cada 1.000.