Situación crítica en las UCI de Valencia y preocupación por el inminente colapso en el resto de CCAA

La evolución de la tercera ola preocupa mucho a los expertos. Y es que, aunque el Ministerio de Sanidad prevé que el pico de la curva se alcance en los próximos días, según sanitarios y epidemiólogos consultados por 65Ymás, lo peor estaría todavía por llegar en los hospitales de muchas de regiones de España.

"Hay riesgo de colapso, a pesar de todas las medidas. De hecho, en algunos sitios, como Valencia, ya están al límite. Si no paran de subir los casos, los hospitales tendrán problemas, como en Inglaterra, donde los enfermos tenían que esperar fuera del hospital en las ambulancias, porque no había sitio para ellos", explica el investigador de la Universidad de Leicester, Salvador Macip. 

Así, además de Valencia, otras comunidades como Murcia, Extremadura, Cataluña, ciertas ciudades de Aragón y de Galicia, La Rioja, algunas ciudades de Castilla-La Mancha y Castilla y León y Madrid muestran datos preocupantes de contagios o de población hospitalizada y en UCI, según explica a este diario el vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (@SEMES_), Pascual Piñera.    

Fuente: Ministerio de Sanidad. 

"Vienen familias enteras"

"Estamos pagando las consecuencias de toda la interacción social que hemos tenido durante la Navidad. Cada día hay más casos y eso lleva consigo un mayor número de pacientes vistos en urgencias", apunta. "Vienen familias enteras", asegura. 

"El problema, es que ahora los hospitales se están llenando. El 50% del mío (Hospital General Universitario Reina Sofia) se está dedicando a pacientes COVID. Y ayer tuvimos que desalojar un ala a la velocidad del rayo, porque no nos cabían más enfermos", relata.

Por ello, reconoce, "preocupa el colapso que se pueda ver en los próximos ocho o 10 días". "Esto no ha hecho nada más que empezar", avisa. 

Fuente: Ministerio de Sanidad. 

Los sanitarios están "agotados"

Coincide con el vicepresidente de SEMES, la secretaria del sindicato de enfermería SATSE (@Sindicato_SATSE), María José García. "Vemos la situación mal, y empeorando. Vamos subiendo de casos a pasos agigantados", advierte.

Además, la sanitaria sostiene que, en esta ocasión, los "cuidadores" están "agotados". "Hemos enganchado una ola con otra. Por nuestra parte, pondremos toda la buena voluntad del mundo, pero no somos héroes. Hay una falta de esperanza y sensación de impotencia", apunta. 

Por esa razón, desde su sindicato piden un refuerzo de las plantillas. "No terminamos de entender por qué hay enfermeras en paro. Es imprescindible que se refuerce el sistema. Hay que tener mejores recursos porque, si no, no vamos a poder atender a toda la población en condiciones", sostiene. 

"Ahora mismo, cada minuto, se está realizando un ingreso y eso satura las urgencias, aunque las esperas son distintas en cada centro y en cada provincia. Pero, si seguimos con este nivel de contagios, se van a ir acrecentando las horas de espera", señala. "Nos vamos encaminando a vivir una situación como la de marzo y abril", sentencia. 

La Comunidad Valenciana, un caso preocupante

Lo más cercano, hasta el momento, a un caso de situación de saturación del sistema hospitalario podría ser, en cierto modo, el de la Comunidad Valenciana. Y uno de los indicadores que así lo acreditan, a parte de la incidencia acumulada que supera los 800 casos, es su porcentaje de ocupación de las UCI por pacientes de COVID: más del 50%.

Sin embargo, los sanitarios matizan que esta tercera ola está siendo muy distinta a la primera, por el perfil del contagiado, que es más joven. Y, probablemente, sostienen, no se vivan escenas tan crudas como las de Madrid o Cataluña en marzo/abril (falta de EPIs, sanitarios jubilados trabajando en los hospitales, atención primaria bajo mínimos, pacientes que llegaban muy deteriorados al sistema de salud, personas que fallecían en sus domicilios, funerarias saturadas, etc.). 

Con todo, la situación hospitalaria valenciana no deja de ser preocupante y roza una saturación, que no vivieron en primavera de 2020, según comenta a este periódico el secretario general del sindicato de médicos CESM Comunidad Valenciana (@cesm_sindicatos), Víctor Pedrera. 

"El impacto es demoledor. Las próximas semanas van a ser muy críticas. Han habilitado hospitales de campaña y se ha empezado a ingresar a pacientes en las carpas", comenta. También, añade, hay trabajadores de otras ramas que están empezando a trabajar con COVID ante la necesidad de más personal.

"Las UCI, las tenemos a tope, por encima del 50% de COVID. Por tanto, para acoger a más pacientes, o se recurre a la medicina privada o se habilitan camas fuera de lo que es la hospitalización habitual. Si no, no podremos darle servicio a esas personas", adelanta. "Estamos bordeando la raya. Estamos dentro del rango de 'lo muy peligroso' ", añade.

Y advierte: "Los criterios de ingreso en UCI se miran con mucho más rigor, ahora que las camas escasean. Por desgracia, es algo que hay que hacer, tenemos que optimizar los recursos que tenemos". 

Madrid: "Las previsiones son muy malas"

Y no sólo la Comunidad Valenciana vive una situación hospitalaria complicada. En la región de Madrid, que fue una de las más castigadas en marzo y abril, se está llegando de nuevo a un escenario de tensión en el sistema sanitario con más del 40% de las camas UCI ocupadas.

"Está muy mal. Tenemos el 100% de la UCI médica ocupada. Al principio de la pandemia, teníamos ocho camas y ampliamos en seis. Ahora, las 14 están ocupadas y hemos tenido que usar la unidad de reanimación post-quirúrgica. Por eso, se han suspendido los quirófanos y sólo se hacen cirugías urgentes o lo oncológico no aplazable. En breve, a lo mejor, debemos ocupar otro espacio", cuenta a este diario el sanitario del Hospital Infanta Sofía y miembro del sindicato MATS (@matsmadrid), Eduardo Fernández, que critica que, a pesar de todo, en su centro tienen "16 boxes de UCI" que no están operativos desde antes de la pandemia, por decisión, según asegura, de la Comunidad. 

Fuente: Ministerio de Sanidad. 

Miedo a que vuelva el triaje

"Nos quedan cinco camas UCI operativas y la mitad del hospital está utilizado para COVID. De aquí a unos días, un porcentaje se va a poner malo y nos vamos a quedar sin camas", sostiene.

Y esta falta de recursos –cuando el traslado a otros hospitales es imposible– puede tener consecuencias muy negativas para la población más vulnerable. Y es que, si algo teme este sanitario, es que vuelva de nuevo a aplicarse el "cribado" de casos que vivieron "en marzo". "Se utiliza una fórmula de años de vida ganados. Es decir, se quedarían con la cama los que tienen más posibilidades de tener años de vida", comenta.

Aun así, matiza "es algo que nunca se hace, porque siempre hay camas". Sin embargo, avisa, "las previsiones son muy malas" y, aunque "es importante no transmitir un mensaje apocalíptico", señala, "la situación es grave". 

Por ello, el miembro del sindicato MATS concluye con la siguiente recomendación a los mayores: "Espero que la gente de 65 años se cuide muchísimo, porque estamos en un momento muy serio. Es verdad que la edad no es el primer factor que se tiene en cuenta para el ingreso, pero tiene un peso grande en la toma de decisiones".