Cómo afecta jurídicamente al ciudadano la unión de dos pueblos

Don Benito y Villanueva de la Serena se han convertido en la tercera ciudad más grande Extremadura por detrás de Badajoz y Cáceres tras el referéndum que se celebró el domingo 20 de febrero entre sus habitantes.

La consulta popular es el comienzo de un procedimiento que durará diez años, y durante el cual se abordarán diferentes cuestiones como el nombre del municipio, la organización política y administrativa del nuevo ayuntamiento, la ordenación urbanística o las modificaciones jurídicas a aplicar en materia fiscal, para eliminar las duplicidades de las ordenanzas municipales.

Todo este procedimiento lo llevarán a cabo los alcaldes actuales de ambas localidades, y un grupo de trabajo específico que se ha creado para la unificación política, administrativa y normativa del nuevo municipio, cuyo nombre lo decidirán dos cronistas y dos profesores universitarios.

Teniendo todo esto en cuenta, Legálitas ha recordado en una nota de prensa, que a nivel normativo no puede haber duplicidad de ordenanzas reguladoras ya que se puede crear una inseguridad jurídica y un trato desigual para la población. Por eso, uno de los aspectos más importantes que tendrá que abordar el grupo de trabajo será la supresión, modificación o creación de las ordenanzas municipales, tales como las normas fiscales, de convivencia, de circulación, etc.

Creación de un censo único

El grupo de trabajo tendrá que crear un censo nuevo único a partir de los censos de las dos poblaciones preexistentes. Los censos recogen la información de los habitantes de un municipio (edad, sexo, nivel de educación, acceso a servicios básicos, ingresos mensuales, características de la vivienda habitada...). Es decir, almacena variables tanto cualitativas y cuantitativas.

Los censos se actualizan cada diez años, por lo que el primer paso será actualizar cada uno de los censos, y luego unificarlos, o simplemente unirlos.

Nuevo padrón municipal

Por otro lado, se deberá pasar de dos padrones municipales a uno. El padrón municipal recoge los datos imprescindibles de residencia y domicilio de todos los vecinos de un municipio. Esto seguramente se hará de manera automática, y los ciudadanos no tendrán que hacer trámites adicionales.

Plan de ordenación urbana

Todos los municipios tienen un plan de ordenación urbana donde se definen diferentes aspectos de la ciudad como calles, edificios, parques o equipamientos, entre otros, que afectan a los ciudadanos del municipio en lo referido a la ordenación de los espacios públicos del municipio, la construcción de viviendas, de infraestructuras, la clasificación del suelo y las construcciones que se pueden realizar en ellos.

Por tanto, con la fusión de los dos municipios, habrá que hacer un nuevo plan de ordenación urbana que englobe a todo el nuevo territorio.

Implicaciones fiscales

La fusión de los pueblos no afectará a la parte tributaria de sus contribuyentes, ya que los habitantes seguirán declarando el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y los rendimientos obtenidos como hasta ahora. 

Además, como seguirán perteneciendo a la misma Comunidad Autónoma, tanto los beneficios como las retenciones que les corresponden continuarán aplicándose de la misma manera.

Los mismo ocurre con el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, que al ser un impuesto estatal cedido a las Comunidades Autónomas no acarreará cambios.

Los únicos impuestos que pueden implican un cambio fiscal para los ciudadanos son el Impuesto de Circulación, que se pagará en el ayuntamiento de la localidad donde figure el vehículo domiciliado, y la plusvalía que se pagará en el consistorio dónde esté ubicado el inmueble que se vende.