Fernando Ónega: "Cuando me fui de Moncloa, Adolfo Suárez estuvo sin hablarme mucho tiempo"

El presidente del Comité Editorial de 65YMÁS, Fernando Ónega, ha sido entrevistado en el programa Testigos de la Transición, un podcast de Capital Radio que rinde homenaje a las grandes figuras del periodismo contemporáneo español y que presenta Víctor López. 

"Hoy vamos a retroceder al periodismo de los años 70", comenzaba explicando López, que para presentar a Fernando Ónega quiso recordar que fue el artífice de la famosa frase "puedo prometer y prometo" que pronunció Adolfo Suárez durante los días previos a las elecciones de 1977, cuando el periodista era el director del departamento de prensa de Presidencia del Gobierno. "Fernando Ónega sigue siendo una de las voces autorizadas de la Transición", aseguraba el presentador.

Tras un breve repaso a su carrera profesional y a los numerosos galardones que ha recibido el periodista a lo largo de su trayectoria, López, destacó que Ónega "continúa siendo uno de nuestros analistas políticos más prestigiosos y al responsable de introducir las tertulias de la radio en España".

Pero antes de comenzar a hablar de su trabajo como periodista, López quiso saber más sobre los orígenes gallegos del periodista: "De aquella época guardo un recuerdo mágico", asegura. De familia humilde y campesina, el periodista sigue estando muy agradecido a sus padres por darle la oportunidad de estudiar una carrera, tanto a él como a su hermano.

"Me suspendieron el primer examen de ingreso de periodismo y tuve que ingresar en Políticas", confesó Ónega. 

Su relación con Adolfo Suárez

López quiso saber cómo se conocieron el periodista y Adolfo Suárez. "A Suárez lo conocía como se conoce a los ministros, ahora y entonces, viéndolo en actos y saludándolo, nada más", comenzó explicando.

"Un día de la primavera de 1976, suena el teléfono y me dice que 'el ministro secretario le espera mañana'", cuenta Ónega. En aquella visita, Suárez le pidió que se encargara del discurso de defensa de la ley del derecho de asociación política. Una propuesta que no rechaza, y que fue todo un éxito.

Su etapa como jefe del departamento de prensa del Gobierno se divide en dos fases: "Entré con toda ilusión del mundo e hicimos maravillas (...) Fue una etapa apasionante y sorprendente. Fue una etapa de apertura, en la segunda empecé a decaer porque Suárez era muy complicado para las relaciones con la prensa", asegura.

Como no podía ser de otra manera, el presentador quiso saber el origen de la famosa frase "puedo prometer y prometo" que pronunció Suárez: "Suárez quería transmitir que todo lo que prometía lo iba a cumplir, y entonces a mí me sale eso". 

"Me dio pena el final de Súarez. Cuando me fui de Moncloa se enfadó conmigo y estuvo sin hablarme mucho tiempo. Años después me mandó una carta muy emocionante y empezamos a hablar casi a diario", comentó Ónega.

Para el periodista, Súarez junto con Felipe González y con el rey –"el que conocemos, no el que hemos descubierto al final"– es una de las figuras del último medio siglo de España.

El periodismo de antes y el de ahora

"Cada generación tiene su manera de ver la historia, pero me apena es que para justificar esta forma de ver la historia, haya que negar la evidencia de lo que ha ocurrido", afirma el periodista, cuando el presentador le preguntó por la crítica actual a aquella época. "Un golpe de estado sin información, triunfa", sentenció Ónega.

"Hay demasiado periodismo. Ya es periodista todo el mundo, las informaciones son tan contradictorias que yo ya no me fío de lo que leo", confesaba Ónega cuando le preguntaban sobre el periodismo actual, y aseguró que lo importante es contrastar y saber diferenciar las opiniones de los hechos.

"Tenemos un problema, y es que no sabemos ponernos en el lugar del otro", opina el periodista. 

El Fernando más personal

"¿Con qué palabras te definirías?", le pregunta López al periodista: "Tímido, difuso e indefinido". La salud y la familia son las dos cosas que más valora Ónega, que aún sigue levantándose a las cuatro de la mañana "para trabajar".

"Vocación, curiosidad infinita y saber decir algo" son las tres cualidades que para Ónega tiene que tener cualquier periodista. 

"El periodismo siempre será necesario porque la gente necesita estar informada y porque solo desde el periodismo se puede adoptar una buena decisión", asegura.

"Si hablamos de periodismo hay que seguir creyendo en la verdad y en el rigor", concluía Ónega, al que le gustaría ser recordado "como una buena persona, que no hizo daño a nadie, aunque eso es imposible cuando has dirigido algún medio". 

El periodista se despidió del programa asegurando que lo único que le queda por hacer es retirarse.