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Exhumación de Primo de Rivera: tres falangistas detenidos tras enfrentarse a la Policía
A la llegada de los restos del fundador de La Falange al cementerio de San Isidro
La Policía Nacional ha detenido a tres personas tras el altercado registrado entre los seguidores de José Antonio Primo de Rivera y las fuerzas de seguridad a la llegada del cortejo fúnebre con los restos del fundador de La Falange Española al cementerio de San Isidro.
Según ha podido comprobar 'in situ' Europa Press, la Policía Nacional ha detenido a tres personas que han sido trasladadas a dependencias policiales. La detención tiene lugar después de que cerca de 200 falangistas hayan roto la barrera policial que les alejaba de la necrópolis y hayan forcejado con agentres en el momento en el que han llegado los restos del político, exhumado este lunes del Valle de los Caídos.
Con gritos de "Arriba España", "Gobierno criminal" y "Primero asesináis y luego profanáis", los falangistas se encontraban en laa cera frente al cementerio protestando por la exhumación de los restos de Primo de Rivera. Cuando ha llegado el coche fúnebre, han logrado muy fácilmente romper la barrera policial desplegada para dicho efecto, enfrentándose a los agentes.
Los seguidores del fundador de La Falange también han entonado el 'Cara al Sol', el himno falangista, y han desplegado banderas de La Falange y pancartas con la cara del político y con el escrito: "José Antonio Primo de Rivera ¡Presente!". Todo ello mientras algunos falangistas cantaban con el brazo en alto.
🔴 La policía tiene que intervenir en el cementerio de San Isidro para contener a los simpatizantes de Primo de Rivera ante la llegada de los restos mortaleshttps://t.co/OXIRLzFzBS pic.twitter.com/1yQEFNEfPs
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) April 24, 2023
"¿Dónde están los voxeros?"
Después de los altercados, los falangistas han continuado coreando algunos mensajes como "José Antonio Primo de Rivera", "Patria, Justicia, Revolución" o "¿Dónde están los voxeros", en referencia a los seguidores del partido político Vox.
No es la única crítica que han lanzado, pues han recriminado a los familiares que no han "luchado lo suficiente" por evitar la exhumación del político muerto durante la guerra civil.
En concreto, critican el "silencio" de la familia Primo de Rivera y que no haya dado una batalla jurídica y en los medios de comunicación para defender a su familiar, poniendo como ejemplo que los familiares del dictador Francisco Franco sí "dieron la batalla" para que no fuera exhumado del Valle de los Caídos.
En cumplimiento de la Ley de Memoria
La exhumación del fundador de La Falange se ha producido en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática, que prohibe que dirigentes del golpe de Estado de 1936, la Guerra Civil y el franquismo permanezcan inhumados "en un lugar preeminente de acceso público, que pueda favorecer la realización de actos públicos de exaltación", según indica el texto aprobado el pasado mes de octubre.
Hasta este lunes, su tumba se encontraba frente al altar mayor de la basílica del Valle, junto al lugar donde estaba la del dictador Francisco Franco, hasta que fue exhumado en octubre de 2019 y trasladado al cementerio de Mingorrubio en El Pardo.
Según la ley de Memoria, Primo de Rivera podía continuar inhumado en el Valle, como víctima de la guerra –fue fusilado por el bando republicano en noviembre de 1936 en Alicante– pero no en un lugar preeminente. En todo caso, su familia trasladó la petición de sacar sus restos para así dar cumplimiento al deseo que el político dejó escrito en su testamento, que sus restos descansaran en un lugar católico.
"Deseo ser enterrado conforme al rito de la religión Católica, Apostólica, Romana, que profeso, en tierra bendita y bajo el amparo de la Santa Cruz", señala una de las cláusulas, según recogía el comunicado emitido por la familia el pasado mes de octubre. Con la entrada en vigor de la norma, el Valle de los Caídos pasó a llamarse Cuelgamuros y se convirtió en un cementerio civil.
Este mismo lunes se cumplen 120 años del nacimiento de Primo de Rivera, el 24 de abril de 1903, y grupos falangistas han criticado que el Gobierno haya hecho coincidir esta fecha con la reubicación de sus restos.
Quinto entierro
Este es el quinto entierro del fundador de La Falange, que fue fusilado en la cárcel de Alicante en 1936 y enterrado en una fosa común. Dos años después sus restos mortales se colocaron en un nicho, en el mismo lugar. Una vez finalizada la guerra civil, en 1939, fue exhumado de nuevo y llevado desde Alicante hasta El Escorial.
Su ataúd fue acarreado a pie por falangistas durante 10 días, pasó por Aranjuez, recorrió la Gran Vía de Madrid y entró en el monasterio de El Escorial el 30 de noviembre de 1939. Allí fue recibido por Franco y enterrado junto al altar mayor de la basílica.
Años después, en noviembre de 1959, cambió otra vez de ubicación, el día antes de que se inaugurase el Valle de los Caídos, y quedó enterrado en un lugar de honor en la basílica de Cuelgamuros.