Región de Murcia

Tres deliciosos postres típicamente murcianos

Beatriz Torija

Jueves 11 de agosto de 2022

10 minutos

De los paparajotes a la tortada murciana pasando por los cordiales de la Región de Murcia

Receta de cordiales, el dulce de almendras y cabello de ángel murciano para chuparse los dedos. Foto: Murcia turística
Beatriz Torija

Jueves 11 de agosto de 2022

10 minutos

Entre la cantidad de los tesoros gastronómicos que ofrece al visitante la Región de Murcia se encuentra, como no podía ser de otra forma, una enorme cantidad de postres típicamente murcianos de los que hoy hemos seleccionado tres deliciosos ejemplos: paparajotes, tortada murciana y cordiales.

Paparajotes

El paparajote es, sin lugar a dudas, el postre más emblemático de la Región de Murcia, un tesoro culinario dulce, sencillo, aromático y delicioso. No se prepara apenas fuera de Murcia, aunque ya es muy conocido por toda España, no en vano los murcianos consideran esta delicia una de las siete maravillas gastronómicas de España.

Huevo, azúcar, levadura, leche, harina, limón, canela y, por supuesto, una hoja de limonero, que, pese a que no se come, es el gran protagonista de esta receta.

Se toman –como mínimo-, de dos en dos y, en ocasiones, hay quien los acompaña con una bola de helado de vainilla y un chupito de licor.

Cómo se hacen los paparajotes, el postre murciano para enloquecer. Foto: Murcia turística

Ingredientes necesarios

  • 2 huevos
  • Leche, medio litro
  • Levadura, medio sobre
  • Harina, 500 gr.
  • Azúcar, 100 gr.
  • 1 limón
  • Aceite de oliva suave, para freír
  • Azúcar, para adornar
  • Canela en polvo, 1 cucharilla
  • Sal, una pizca
  • Hojas de limonero

Elaboración de los paparajotes

Antes de empezar, con la ayuda de un rallador, vamos a sacar la ralladura de la cáscara del limón. Es muy importante, en este punto, rallar solo la parte amarilla del limón, que es donde se concentran los aceites esenciales del limón y su aroma cítrico, evitando llegar hasta la parte blanca, que resulta amarga, y podría echar por tierra todo el postre. Reservamos.

En un bol amplio, batir los huevos junto con el azúcar con la ayuda de una varillas hasta obtener una mezcla blanquecina y espumosa. Añadir la leche y seguir batiendo.

Por último, añadimos a la masa la raspadura del limón y la levadura y volvemos a mezclar.

Ahora, vamos añadiendo la harina. Es importante incorporarla poco a poco, para controlar la textura de la masa y así añadir más harina si es necesario, o parar. A medida que vamos incorporando harina removemos para que se vaya integrando.

 La textura ideal de la masa para hacer paparajotes es líquida. Ligeramente espesa, pero no demasiado. Una vez que la tengamos, añaidmos un pellizco de sal y reservamos.

Mientras, lavamos bien las hojas del limonero y las secamos con la ayuda de un papel absorbente. Es importante que estén bien secas, puesto que de tener algo de agua, la masa podría no adherirse bien a la hoja. Reservamos.

Ahora vamos a preparar nuestra estación de fritura. Por un lado, ponemos abundante aceite a calentar en una sartén. Hemos de poner una buena cantidad, para que al meter las hojas queden completamente sumergidas y no sea necesario darles la vuelta.

Al lado, preparamos una fuente o un plato cubierto con papel absorbente.

Y preparamos también un plato con dos o tres cucharadas de azúcar y una cucharilla de canela. Mezclamos bien y lo dejamos ahí preparado.

Cuando el aceite esté caliente, pero no humeante, comenzamos a coger por el rabito las hojas de limonero e introducirlas en la masa. Cuando estén bien impregnadas, las pasamos directamente a la sartén.

Vamos añadiendo hojas de limonero con masa a la sartén, pero con cuidado de no poner demasiadas al mismo tiempo. De hacerlo, bajaría la temperatura del aceite y la fritura absorbería demasiado aceite, lo que no resulta después nada agradable.

A medida que vayan estando doraditas, las sacamos con una espumadera al plato con papel absorbente, para retirar el exceso de aceite.

Cuando estén todos los paparajotes ya fritos, y en caliente, los pasamos por ambas caras por el plato con azúcar y canela.

Los paparajotes ya están listos. Los podemos colocar en una bonita fuente y servir. Lo ideal es tomar este postre a temperatura ambiente… pero si están un poco tibios, también estarán riquísimos. Eso sí, han de estar recién hechos, de un día para otro este postre perderá un poco, puesto que perderá ese toque crujiente de la fritura.

Y aunque a cualquier murciano seguramente no sea necesario hacer esta advertencia, seguro que a más de uno de fuera de la Región sí. ¡Ojo!, la hoja de limonero no se come, se va mordiendo la mas de cobertura alrededor.

Tortada murciana

La tortada murciana es una tarta muy especial y uno de los bocados dulces más típicos y apreciados de la región de Murcia. No es difícil de hacer, aunque sí requiere de algo de paciencia, con varias elaboraciones: almíbar, la crema y yema pastelera, el cabello de ángel y su majestad, el merengue tostado.

Tampoco es un postre caro, puesto que los ingredientes con los que se elabora son sencillos: azúcar, agua, harina, huevos, leche, vainilla, maicena... Y el resultado es espectacular. Para los amantes del merengue, es un postre obligado.

Ingredientes:

  • Tres planchas de bizcocho
  • Cabello de ángel

Para la yema pastelera:

  • 150 ml. de agua
  • Azúcar 170 gr.
  • 4 huevos

Para la crema pastelera:

  • 950 litro de leche + 50 ml. de leche aparte
  • 1 vaina de vainilla
  • Yemas de huevo, 200 gr. (serán como unas 12 yemas)
  • 85 gr. de maicena
  • 175 gr. de azúcar

Para el merengue

  • Claras, 350 gr.
  • Azúcar, 550 gr.
Tortada murciana, receta dulce que lo tiene todo: merengue, crema, yema tostada y cabello de ángel. Foto: Murcia turística

Elaboración:

En primer lugar, vamos a preparar la yema pastelera. Para ello acercamos un cazo al fuego y ponemos a calentar el agua junto con el azúcar. Removemos hasta que forme un almíbar suave, al que no hay que dejar coger color. Cuando tenga textura de bola o punto fino, lo apartamos del fuego.

Batimos en un bol los huevos y cuando estén espumosos, se los añadimos poco a poco al almíbar sin dejar de remover. Mezclamos bien hasta que esté todo bien integrado.

Volvemos a poner la mezcla en el fuego, muy suave removiendo constantemente. Es muy importante remover sin parar tocando y arrastrando el fondo, para que no se forme una capa cuajada en el fondo.

Cocinamos hasta que la crema cuaje. Lo sabremos porque al remover, se hace espacio en la crema sin cerrarse rápidamente. Reservamos.

Colamos esta mezcla. La pasamos por un colador de trama fina y lo pasamos a un segundo bol. Así evitamos grumos o alguna parte cuajada que luego no sea agradable en boca.

Tortada murciana, receta dulce que lo tiene todo: merengue, crema, yema tostada y cabello de ángel. Foto: Murcia turística

Para la crema pastelera:

Ponemos otro cazo al fuego y añadimos la leche, los 950 ml.

Abrimos la vaina de vainilla longitudinalmente y raspamos el interior. Echamos en la leche las semillas de la vainilla y también la vaina, partida en dos.

Infusionamos a fuego muy suave para que la vainilla deje todo su aroma, sin dejar que llegue a hervir, durante unos minutos. Y reservamos.

Disolvemos la maicena en un vaso con los 50 ml. de leche, que debe estar fría, removiendo bien con una cucharilla.

Aparte, ponemos en un bol las yemas de huevo e incorporamos el azúcar. Batimos con las varillas hasta obtener una mezcla blanquecina y homogénea. Añadimos el vasito de leche con la maicena y mezclamos de nuevo, para incorporar bien.

Del cazo donde teníamos la leche, retiramos las vainas de vainilla, pero dejamos las semillas. Incorporamos la mezcla de yemas y azúcar y volvemos a poner en el fuego, muy suave. Cocinamos a fuego suave hasta que espese, sin dejar que hierva. Cuando esté listo, reservamos.

Para el merengue:

Ponemos las claras en un bol, añadimos el azúcar y comenzamos a batir con las varillas… sin son eléctricas mejor que mejor. Así, hasta que monten las claras a punto de nieve.

Montamos la tortada murciana:

Colocamos una base de bizcocho y la pintamos con un almíbar sencillo (ya sabéis, agua y azúcar al fuego hasta que espese ligeramente). Lo hacemos con una brocha para asegurarnos de no poner demasiado almíbar y emborrachar mucho el bizcocho, lo que restaría consistencia al postre.

Extendemos una capa de nuestra crema pastelera. Lo podemos hacer con una manga pastelera, o con una cuchara y bastante cuidado.

Cubrimos con una segunda plancha de bizcocho, que volveremos a pintar con almíbar.

Ahora extendemos una fina capa de cabello de ángel, que en esta ocasión también hemos optado por comprar ya hecha.

La extendemos bien, que quede uniforme y cubrimos con la tercera y última plancha de bizcocho. También pintamos con almíbar.

Ahora cubrimos con una capa de yema pastelera y espolvoreamos con un poquito de azúcar. Quemamos con la ayuda de un soplete de cocina o de un quemador. Por último, decoramos con el merengue. Se puede cubrir toda la tortada, o poner solo en los laterales y un adorno por toda su circunferencia. Lo ideal es hacerlo con una manga pastelera para así darle una bonita forma.

Y ahora sí… ¡a disfrutar que te lo has merecido!

Cordiales

Los cordiales son un dulce de almendra y cabello de ángel típico en la región de Murcia. Se toman en días especiales y celebraciones. En Navidades no suelen faltar… pero tampoco en otras fiestas, ya sean celebraciones familiares o de otro tipo: fiesta de la primavera, Pascua, carnavales...

Ingredientes

  • 500 gr. de harina de almendras
  • 300 gr. de azúcar
  • 1 limón (solo la ralladura)
  • 3gr. de canela en polvo
  • 4 huevos
  • Cabello de ángel
  • Obleas
Cordiales, el dulce de la Región de Murcia

Elaboración

Para hacer esto cordiales, comienza por poner en un bol la harina de almendras. Añade el azúcar.

Saca la ralladura de la cáscara de un limón. Ralla con cuidado la cáscara, para tomar solo la parte amarilla, que es donde se concentran los aceites esenciales del limón y el aroma cítrico, pero evita la parte blanca, que es amarga y podría echar al traste con el postre.

Cuando la tengas, añade la ralladura al bol con la harina y el azúcar y mezcla todo con la ayuda de una espátula. Añade la canela en polvo.

Incorpora los huevos y comienza a mezclar bien todos los ingredientes hasta formar una masa espesa, pero homogénea.

Ahora, ya podemos ir formando nuestros cordiales. Ve cogiendo una pequeña porción de masa y dale forma de bolita con las manos, como si se tratara de una albóndiga. Aplástala con la mano un poco haciendo una incisión en el centro. Será el hueco para poner una cucharilla de cabello de ángel.

En cuanto tengas el cabello de ángel, ve cerrando la bolita para que el relleno se quede completamente cubierto. Coloca la oblea sobre el cierre, para que tape esa parte, que siempre quedará un poco más fea. Da la vuelta a cada cordial y, si quieres, moldéala en forma de pirámide. Puedes dejarla en forma de bolita también, pero es cierto que la forma tradicional de los cordiales murcianos es en forma de pirámide, más o menos.

Coloca tus cordiales sobre la bandeja y mete en el horno, que ya debe estar precalentado a 200°C y hornea durante 20 minutos más o menos, hasta que los veas bien doraditos.

Sobre el autor:

Beatriz Torija

Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.

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