Salud

Cómo curar ampollas en los pies de forma rápida y eficaz

Agus Calvet

Foto: BigStock

Miércoles 16 de diciembre de 2020

4 minutos

Una buena hidratación, limpieza y calzado adecuado nos ayudan contra estas lesiones cutaneas

Cómo curar ampollas en los pies de forma rápida y eficaz
Agus Calvet

Foto: BigStock

Miércoles 16 de diciembre de 2020

4 minutos

Molestas y, si no las tratamos, pueden ser muy persistentes y hasta peligrosas para nuestra salud, en especial si somos diabéticos. Así son las ampollas en los pies que aparecen por diversas causas.

Usar unos zapatos nuevos suele ser la causa de la aparición de las temibles ampollas en los pies, pero, atención, utilizando calzado cómodo también nos puede suceder si nuestros calcetines o medias no son las adecuadas o nos aprietan demasiado.

Las ampollas tienen su origen en una zona irritada, bien por fricción, por calor, que evoluciona hacia una bolsa de piel fina que contiene líquido acuoso. En realidad, una ampolla es un mecanismo de defensa del organismo, que intenta proteger el tejido interior de esa ‘agresión’ exterior, generando líquido (linfático y acuoso).

Por lo general, las ampollas se curan por si solas en otras partes del cuerpo, pero los pies, al estar generalmente cubiertos con ropa (calcetines, medias) y utilizar calzado, no es un lugar para que la curación se realice adecuadamente e incluso puede reventarse dicha ampolla y generar una infección. Por ello debemos tomar ciertos cuidados.

¿Cómo?

Lo primero es lavarnos bien las manos con agua y jabón. Después, y antes de curar la ampolla, hay que aplicar en toda la zona donde la tengamos un antiséptico tópico, es decir, algún producto tipo Betadine. Atención a no utilizar algodón, ya que siempre deja rastros de hilos que pueden molestar en la cura.

Si la ampolla no se ha explotado, y no es demasiado grande o en una zona muy molesta, lo mejor es taparla con un apósito de algodón para protegerlo de la rozadura. Y cada día realizar la misma cura las veces que sea necesaria.

Si la ampolla es muy grande e, indefectiblemente, vemos que reventará al andar, lo mejor es hacerlo nosotros mediante una aguja, desinfectada previamente. Pincharemos la ampolla con mucho cuidado e intentaremos drenar el líquido ayudándonos de dos apósitos, nunca apretando directamente con los dedos. Después, aplicaremos antiséptico y lo taparemos con un apósito.

Podemos utilizar en lugar de gasas comunes apósitos hidrocoloides, de venta en farmacias, que nos ayudan en la cicatrización ya que están diseñados para este tipo de heridas. Están tratadas estas gasas con productos que, al entrar en contacto con la herida, se transforman en un gel que aísla de bacterias la zona y ayuda en la regeneración celular. Existen varias marcas y, algunas como Compeed, se ha especializado en apósitos adhesivos diseñados para las rozaduras y ampollas en los pies.

 

bigstock Painful Heel Wound On Mans Fee 397292333
Foto: BigStock

 

Como ocurre siempre en temas de salud, la mejor estrategia es la prevención, y en este caso no podría ser menos. Para evitar la aparición de ampollas hay que huir de estrenar calzado un día que se tenga previsto caminar o utilizar mucho, que dicho calzado tenga una holgura necesaria, utilizar calcetines o medias con costuras mínimas y de tejidos transpirables. También debemos hidratar bien los pies, con cremas específicas, ya que la piel seca es más vulnerable a rozaduras y la aparición de ampollas.

Sobre el autor:

Agus Calvet

Agus Calvet es redactor especializado en temas de consumo.

… saber más sobre el autor