Cómo conseguir que la ducha tenga más presión

Seguro que en muchos hogares este es un problema real. El agua del grifo o de la ducha no sale con la suficiente fuerza y eso a veces dificulta que la ducha o el lavado de manos sea todo lo satisfactorio que debiera ser. Es algo común y que en muchas ocasiones puede resultar desagradable para el propio consumidor.

Aunque está situación nos resulte frustrante, tiene una fácil y sencilla solución. Es cierto que a veces hay que tener en cuenta factores externos. Por ejemplo, si vivimos en la parte de arriba de un edificio, el agua llegará generalmente con menos presión que en las viviendas inferiores. 

Sin embargo, en un gran número de casos, está en nuestras manos la solución de esta problemática. Esto es porque en la mayor parte de los casos hay un problema con la dureza del agua, lo que genera que la cal se acumule, disminuyendo a su vez la presión del agua.

Frente a este 'tapón' podemos emplear dos métodos. El primero es muy básico y quizás, el primero en venirse a la cabeza, y consiste en limpiar la cal del cabezal del grifo con un cepillo, estropajo o esponja. Sin embargo, no es tan eficaz a largo plazo como el segundo, que consiste en la limpieza total de todo el cabezal de la ducha. Para ello debemos desmontar el propio cabezal, fácilmente desmontable y limpiarla con productos antical. Si aplicamos estos consejos, veremos como la presión de la ducha aumenta en muy poco tiempo.

Con todas estas recomendaciones mejoraremos la calidad de nuestras duchas. Además, son trucos sencillos que podemos hacer nosotros mismos, sin necesidad de gastar dinero 'a lo tonto' y que repercutirá de manera positiva en nuestro bienestar.