La historia del japonés de 75 años que se ha convertido en un héroe en Ucrania

Recientemente se ha conocido una de las historias más emocionantes sobre la guerra de Ucrania. A pesar de ser un conflicto desastroso para la humanidad, acabando con numerosas vidas, este acto solidario arroja un rayito de esperanza en el ser humano. El canal de televisión ucraniano 1+1 ha difundido originalmente la noticia.

Fuminori Tsukiko es un hombre japonés de 75 años que lleva meses ayudando al pueblo de Járkov, una de las zonas más afectadas por los ataques rusos. En medio de su viaje de descanso por Europa, se topó con el conflicto bélico y decidió quedarse en la ciudad ucraniana. Estuvo viviendo en el metro un tiempo ayudando a alimentar a todo aquel que acudiera.

 "Dormía con nosotros, se interesaba y afrontó los problemas con nosotros", cuenta una mujer bajo la nieve que cae estos días sobre Járkov. Para este anciano japonés, los motivos para ayudar están claros: "Amo a Ucrania", reconoce.

A pesar de la diferencia idiomática, juega mucho con los niños y se acaban entendiendo entre ellos, consiguiendo mantener una relación muy cercana.

"En Siria y en muchos países, mucha gente escapó, pero el pueblo ucraniano pelea", explica entre sollozos la situación. "Su gente pelea, yo he ayudado a mucha, mucha gente. Vivo en Járkov y no voy a volver a Japón", añade.

Además de ayudar allí en lo que puede cocinando e incluso comprando medicinas, Fuminori está recolectando donaciones a través de las redes sociales para comprar comida y juguetes para los niños

【Open a PayPal account ❣️】
PayPalアカウントを開設❣️

Thank you to all our supporters.
支援者の皆様、ありがとうございます。

Thank you for your support to everyone living aboard .
海外に居住の皆様、ご支援よろしく
お願い致します。 pic.twitter.com/AUycB2zLgq

— フミさん＠ウクライナ🇺🇦滞在中 (@OR2v2) February 22, 2023

Otras acciones solidarias

Tras un año de guerra, numerosas ONGs en el mundo –también en España–  han lanzado campañas para ayudar al pueblo ucraniano en los aspectos más básicos. Estas ayudas se orientan principalmente en la adquisición de comida, medicinas, refugios de emergencia, calefactores, colchones y mantas, como es el caso de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Cáritas o Acción Contra el Hambre.