Romper el silencio tras 40 años de maltrato: "Cuanta más edad, más dificultades hay para denunciar"
Las mujeres mayores de 65 años suponen cerca del 13% de las víctimas mortales, pero apenas denuncian
María del Pilar, de 60 años ha sido una de las últimas víctimas mortales de violencia de género sénior. El pasado 15 de noviembre, recibió en Alpedrete (Madrid) medio centenar de puñaladas por parte de su marido, que luego se suicidó y sobre el que no existían denuncias previas. Este pasado fin de semana, María Victoria, también de 60 años, fue asesinada por su expareja en Rincón de la Victoria (Málaga). Junto a ellas, Mercedes, Doreen, Josefa, Marisa, Dolores... un total de 12 mujeres mayores de 60 años (39 mujeres de todas la edades) han fallecido este 2025 en España a manos de sus parejas o exparejas, según los registros de Violencia de Género del Ministerio de Igualdad. Y es que las mujeres mayores de 65 años representan alrededor del 13% del total de 1.333 víctimas mortales por Violencia de Género desde que empezó el registro oficial en 2003, siendo el segundo grupo de edad con mayor número de muertes de la serie histórica.
Sin embargo, y aunque la concienciación sobre el tema está cambiando, muchas de ellas se mantienen aún como "víctimas invisibles" y "excluidas", ya que el sistema apenas las contabiliza o tiene recursos específicos para ellas, señalan los expertos. Esto hace que las mujeres mayores de 65 años apenas suponen el 2,3% de los casos activos de víctimas de violencia de género en España, según los últimos datos del sistema VioGén del Ministerio del Interior, de octubre 2025. Son también uno de los grupos que menos denuncia, según la última Macroencuesta de Violencia contra la Mujer (2019), aunque faltan datos actualizados de denuncias por franjas de edad.
Una realidad sobre la que recientemente ponía el foco el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, que señalaba la "doble discriminación de las mayores maltratadas", por género y por edad, y la necesidad de un enfoque propio, ya que "muchas de ellas no son capaces de denunciar a sus agresores" y "enfrentan barreras adicionales para acceder a los derechos y recursos disponibles para la protección contra el maltrato", lo que las coloca en una situación de especial "vulnerabilidad". Es lo que desde la Fundación Helpage (@HelpAgeEspana), que trabaja en defensa de los derechos de los mayores, llaman "indefensión aprendida" de las víctimas de más edad tras décadas de un profundo "desgaste físico y emocional", además de que los recursos suelen estar diseñados para gente más joven, lo que suele frenar a muchas mujeres a la hora de denunciar su caso. En 65YMÁS hemos querido poner el foco en ellas en este 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género.
Más allá de la violencia física
La mayoría de expertos coinciden en las barreras adicionales que sufren las mujeres mayores para dar voz a sus situaciones de maltrato. "Hay una serie de impedimentos que hacen que muchas mujeres mayores no denuncien. La primera es que no se identifiquen como víctimas de maltrato al no haber recibido agresiones físicas, sino de otro tipo, y las que sí lo hacen, no quieren entrar en el largo y complejo proceso de denunciar. Quizás ese no sea su camino, o sea demasiado complicado para ellas", opina Mónica Ramos Toro, geroantropóloga feminista, coordinadora de la Universidad UNATE (@UnateCantabria) y de la Fundación Patronato Europeo de Mayores (PEM). "Muchas de ellas llevan sufriendo violencia a lo largo de 40 años. Violencia no solamente física, sino psicológica, sexual, económica o de control", explica. Por eso, herramientas como el Violentómetro, un documento que recoge las diferentes situaciones de violencia que pueden vivir las mujeres mayores, puede ayudar entender que son víctimas y salir del círculo.
Afortunadamente, las cosas están cambiando según la generación babyboom entra en la sesentena. "Muchas están saliendo de esta situación a su manera, sobre todo las que tienen alrededor de 60 y 70 años, pero luego se encuentran con nuevas barreras burocráticas o sociales", destaca Ramos. Por ello, apunta a que "es crucial que los profesionales estén capacitados para acompañar a estas mujeres, detectar estas situaciones y escuchar sus deseos, ya que a veces solo buscan tener un respiro tras tantos años de agotamiento o cansancio y no necesariamente optan por separarse o denunciar", matiza Ramos. Y es que en muchas ocasiones, los signos de violencia (tristeza, ansiedad, lesiones) suelen atribuirse erróneamente al envejecimiento, tanto por el entorno como por los servicios sociosanitarios.
Derecho a ser felices, se tenga la edad que se tenga
De ahí que "las mujeres de media tardan unos 8 años en denunciar, pero mujeres que ya hayan pasado los 65 años, y sobre todo los 80, tardan entre 30 y 40 años en poner la denuncia o en contarlo. Cuanto más avanzada la edad, más tiempo has aguantado la violencia de género", concluye Ana Bella, fundadora de la Fundación Ana Bella (@Fund_Ana_Bella) para la Ayuda a Mujeres Maltratadas y superviviente de violencia de género. Aunque los datos oficiales aún no muestran un aumento significativo de denuncias en este grupo de edad, los expertos sí observan un cambio generacional en la conciencia y el reconocimiento de la violencia. Aun así, "esta mayor conciencia no se traduce automáticamente en más denuncias, porque persisten barreras estructurales muy fuertes: aislamiento, dependencia económica y miedo a las consecuencias", señalan desde Helpage.
Una de las barreras más importantes para las mujeres de más edad es la económica. Si la mujer tiene más de 65 años, y sobre todo 80 años, y carece de una jubilación propia, es dependiente de la pensión de su pareja, esto actúa como un fuerte impedimento. Otro obstáculo es la falta de apoyo familiar. "A veces el entorno pide a la madre que "aguante y siga cuidando al padre...", cuenta Bella. Además, el maltratador suele proyectar "una imagen positiva de cara al exterior, lo que revierte la culpa hacia la víctima", destaca. Ana Bella, quien enfatiza en la necesidad de apoyo y referentes para este grupo de edad. "Nos merecemos ser felices, da igual las edad que tengamos", sostiene.

Los riesgos de "esperar a que se muera" el agresor
En el caso de las mayores de 80 años, expertos como Jesús Goyenechea, educador social y formador en intervención con mujeres mayores víctimas de violencia de género, señala "hay muchas mujeres que están atrapadas en pensamientos como "llevo aguantando tantos años que ya espero a que se muera para descansar...", con los riesgos que eso supone. Además, destaca el fenómeno que se produce cuando el agresor tiene dependencia. "Por un lado, los agresores ejercen control al no dejar que entre la ayuda a domicilio en casa y por otro, fuerzan a la víctima a que les cuide", resume en base a su experiencia profesional.
Por eso asegura que el primer paso es reconocer que se sufre maltrato, después romper el silencio y contárselo a alguien de confianza y después buscar ayuda especializada, desde el médico de cabecera, servicios sociales o abogados. Pero lamenta la "brutal" falta de recursos y formación específica para este colectivo en la actualidad, además de los procesos burocráticos "agresivos e inaccesibles" para muchas mujeres mayores. Los expertos también destacan la importancia de empezar a hacer campañas de concienciación sobre los varones mayores, para que ayuden a identificar los patrones de maltrato más allá del físico.

Defensor del Pueblo reclama procesos adaptados a mujeres mayores
Con todo, el pequeño grupo que se anima a denunciar también tiene que supera nuevas barreras de acceso a la justicia. Tal como denuncia el Defensor del Pueblo en su último informe anual, "existe una dificultad de acceso de estas víctimas a la Justicia", les resulta complicado acceder a las acreditaciones administrativas y a las ayudas económicas previstas en la ley. El Defensor del Pueblo lamenta que "a esas personas se les obliga a pasar por entrevistas y procesos administrativos en los que su edad, su situación de dependencia, sus problemas de salud y movilidad o sus dificultades tecnológicas no son tenidas en cuenta".
Los servicios sociales aplican un "modelo común de acreditación que está pensado para otro tipo de víctima, laboral y tecnológicamente más capacitada". Además, el Defensor del Pueblo destaca que quienes buscan ayuda se encuentran con "servicios y políticas públicas no adaptados a su realidad, porque tienden a partir del presupuesto de una víctima más joven". Cada día en España se registra una media de 544 denuncias por violencia de género en la pareja, de una total de cerca de 50.000 según los datos del segundo semestre de 2025 del último informe del Consejo General del Poder Judicial. Aún así, los expertos estiman que son muchos más los casos que no se denuncian.
Recursos de atención a la violencia de género
Si crees que estás en una situación de maltrato, puedes llamar al teléfono 016, que atiende a todas las víctimas de violencia de género las 24 horas del día y en 52 idiomas. También el correo 016-online@iguadad.gob.es. En Whatsapp en el 600000016 y en el chat online desde la página web de la Delegación del Gobierno contra la Violencia Machista.
Si una mujer se encuentra en una situación de emergencia también puede llamar al: 112 Emergencias, 091 Policía Nacional y 062 Guardia Civil. Si no puede llamar, puede recurrir a la aplicación Alertcops, que envía una alerta con su ubicación a las fuerzas de seguridad.
Las víctimas de maltrato sordas, con discapacidad auditiva, ciegas o sordo ciegas pueden llamar al 016 con 900 116 016, SVisual, ALBA, Telesor, ATENPRO y la app PorMí. Al 112 con la app 112Accesible. Al 091 y 062 con SVIsual y con la app AlertCops.





