"Es nuestro deber levantar todas las barreras para las personas mayores"

"El Gobierno trabaja para reducir las desigualdades y vulnerabilidades a las que se enfrentan los mayores". Así lo ha asegurado este jueves la ministra de Justicia, Pilar Llop, en la inauguración del XII Congreso Notarial Español, organizado por el Consejo General del Notariado y celebrado en el Auditorio Edgar Neville de Málaga bajo el título El envejecimiento de la sociedad: principal desafío del siglo.

El acto también ha contado con las intervenciones de Francisco de la Torre, alcalde de Málaga; José Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga; José Ángel Martínez Sanchiz, presidente del Consejo General del Notariado (CGN); María Teresa Barea, decana del Colegio Notarial de Andalucía; Rodrigo Tena, coordinador general del Congreso; y Antonio Ojeda, expresidente del CGN y primer presidente del Parlamento de Andalucía.

La ministra Llop ha destacado que la convicción del Gobierno de avanzar sobre los cimientos de la Justicia social "pasa por hacer frente a las necesidades específicas que trae aparejada la longevidad".  "Los poderes públicos tenemos que comprometernos con el envejecimiento. Es nuestro deber de justicia social levantar todas las barreras para las personas mayores. Esta cuestión trasciende cualquier tipo de ideología y afecta a todas las administraciones", ha apuntado.

En este sentido, se ha referido a las conclusiones de la ponencia sobre el proceso de envejecimiento en España, celebrada en el seno de la Comisión de Derechos Sociales del Senado, publicadas en noviembre de 2021, y que destacaban que "como sociedad, debemos promover el empoderamiento de las personas mayores en todos los ámbitos de desarrollo, fomentando su participación en la vida social, económica y pública, para garantizar su inclusión y reducir las numerosas desigualdades y vulnerabilidades a las que se enfrentan".

 

 

Esto, a juicio de la ministra, debe realizarse desde una "visión constructiva" porque "el envejecimiento, el alargamiento de la vida, es uno de los logros más contundentes de nuestras sociedades".

Según ha expuesto, "el incremento de la esperanza de la vida es un éxito social y tiene que ver con las mejoras de las condiciones de vida" si bien plantea "un enorme desafío social y político" que nos indica la "necesidad de salvaguardar las políticas públicas con esta orientación".

También ha defendido que la sociedad debe construirse "para todas las edades y debe ser más inclusiva, amigable, con más consciencia de lo que supone la longevidad y con respeto hacia los procesos de envejecimiento, algo que también afecta al entorno laboral".

Igualmente, Llop se ha mostrado partidaria de aplicar transversalmente a todas las políticas la perspectiva de género en materias que afectan al envejecimiento, "para evitar las brechas, ya que la desigualdad se marca mucho más cuando llegamos a la vejez".

 

 

Sobre esto, ha explicado que "aunque las mujeres vivimos más, las tareas de cuidado han impedido que nuestras carreras profesionales fueran mejores y esto ha afectado, en muchos casos, a las pensiones que perciben las mujeres".

Llop ha explicado que desde su gabinete se está trabajando para transformar la Administración de Justicia en un servicio público "accesible, eficaz y sostenible"; y en este proceso "tenemos muy presentes a las personas mayores, para garantizar su derecho a beneficiarse de la participación y acceso a la Justicia en igualdad de condiciones que el resto de la ciudadanía". En concreto, la ministra se ha referido al grupo de trabajo específico para desarrollar el proyecto "Accesibilidad y envejecimiento", como parte del Plan Justicia 2030.

El objetivo de este grupo es identificar cuáles son las barreras que dificultan o impiden a las personas mayores participar en la Justicia en igualdad de condiciones que el resto de personas, y así introducir las medidas necesarias para que el servicio público de Justicia sea inclusivo, siempre con pleno respeto a los derechos fundamentales de estas personas.

Según la titular de la cartera de Justicia, este modelo pretende que los edificios adopten todas aquellas medidas necesarias para atender a las diversas necesidades de las y los usuarios, integrando los principios de diseño universal y creando así un entorno totalmente inclusivo.

Otro de los temas que ha abordado Llop ha sido el de la brecha digital como consecuencia de la digitalización que vive la Administración de Justicia. En este sentido, la ministra ha indicado que se van a introducir medidas "para minimizar las dificultades de las personas mayores" en el acceso digital a la Justicia como las Oficinas de Justicia en el Municipio.

Llop ha señalado que estas oficinas serán un punto de acceso físico en cada municipio a la Justicia, "para que las personas que tienen dificultades para aproximarse al mundo digital tengan quien les ayude a realizar sus trámites sin salir de su municipio".

Por último, la ministra ha apuntado a la soledad no deseada como otro elemento de reflexión en el proceso de envejecimiento, ya que afecta a más del 21% de los mayores de España, que padecen "angustia permanente, depresión, y mortalidad temprana por sensación de abandono". Para mitigarla, ha dicho, es necesario incidir en la "promoción de un envejecimiento activo y saludable".

"Aliviar las preocupaciones que genera el envejecimiento"

Por su parte, José Ángel Martínez Sanchiz, presidente del Consejo General del Notariado, ha agradecido la presencia de numerosos representantes del Notariado internacional y de otros colectivos (Abogacía, Procura, economistas,...). El presidente del CGN destacó que "la función de los notarios es preservar la fragilidad de la vida humana".

 

 

"A la vejez va asociada la debilidad, es un momento que se vive en soledad, como ocurre en muchos pueblos pequeños. Implica cierta angustia por la cercanía de la muerte. Precisa del cariño de todos, el amor y la fraternidad social pueden convertirla en una forma de inmortalidad. Los notarios estamos de cara a esas personas; los mayores y también los jóvenes, preocupados por el futuro de sus padres. Los notarios nos damos cuenta de la necesidad que existe de aliviar esas preocupaciones y de realizar una acción conjunta por parte de la sociedad. No puede haber una necesidad más notarial", ha explicado.

Sobre el Congreso, Sanchiz ha apuntado que "suscitará un debate y una colaboración de diversos ámbitos, sectores y profesiones para afrontar uno de los temas de nuestro tiempo".

María Teresa Barea, decana del Colegio Notarial de Andalucía, ha recordado sus inicios en la profesión: "Empecé en un pueblo pequeño, con una población con muchas personas mayores. Allí cobró sentido lo que para mí debe ser un notario: un jurista al servicio de la persona. La seguridad jurídica preventiva y el control de la legalidad no se pueden entender sin esa empatía y creatividad para dar solución jurídica a los problemas que los ciudadanos nos plantean. ¡Qué regalo y qué responsabilidad es esa confianza que depositan los ciudadanos en los notarios! Seguiremos estando al lado de los mayores; escuchándoles y ofreciéndoles soluciones, certeza y seguridad. Esa es nuestra función y nuestro compromiso".

 

 

Rodrigo Tena, coordinador general del Congreso, ha apuntado que "la experiencia de la pandemia hacía todavía más urgente y necesario reflexionar sobre el envejecimiento y aprovechar cuanto antes sus lecciones". "La ONU proclamó el periodo comprendido entre 2021 y 2030 como Decenio de las Naciones Unidas del Envejecimiento Saludable, exhortando expresamente a los Estados Miembros para prevenir, vigilar y abordar los efectos desproporcionados de la pandemia de COVID 19 en las personas de edad, velando para que las decisiones que les afecten respeten su dignidad y promuevan sus derechos humanos", ha señalado.

 

 

Por su parte, Antonio Ojeda, expresidente del CGN y primer presidente del Parlamento de Andalucía, ha destacado el papel del notario en la salvaguarda jurídica de las personas mayores: "A la hora de proteger los derechos e independencia del anciano frente a todos, el notario está llamado a intervenir de manera fundamental. En su quehacer cotidiano el notario se convierte en pilar esencial de la defensa de las libertades y de los derechos fundamentales de la personas. Esta centenaria profesión, por la dación de fe intrínseca a su función, exige la presencia y presencia activa, la llamada inmediación que no es una formalidad más, es la inserción del notario en ese torrente de la vida jurídica donde él advera, es decir, da noticia de la verdad. Ser notario es profesar esa pasión por la verdad".

 

 

Francisco de la Torre, alcalde de Málaga, ha incidido en la utilidad del Congreso: "España es uno de los países y con mayor esperanza de vida; debemos ser capaces de ofrecer actividades y vocaciones a las personas mayores, que en otras etapas no han podido desarrollar. Espero que este Congreso suponga un hito y estudiaremos sus reflexiones para aplicarlas al ámbito local".

 

 

Mientras, José Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga, ha indicado que los notarios "desempeñan un importante papel en la sociedad porque su trabajo está íntimamente ligado de las personas". "Además, desempeñan otras funciones como: termómetro de la sociedad, garantes de la legalidad y última línea de defensa de los mayores", ha incidido.

 

 

Previamente, en la conferencia inaugural, titulada Dignidad. La ley del más débil, Javier Gomá, filósofo y director de la Fundación Juan March, ha apuntado que "el concepto más revolucionario del siglo XX ha sido la dignidad, ha aparecido en los principales tratados internacionales los debates éticos, y en su dimensión aplicable en: la clínica, el debate sobre la vida, la manipulación genética, la clonación, los Derechos Humanos, y en la vejez, que es el ensayo de una ciudadanía emancipada de ser productiva y que concede una sabiduría exclusiva".

 

Mesas redondas

A continuación, tuvo lugar el primer panel de debate del Congreso: Hacia un nuevo paradigma a la hora de enfocar el reto global del envejecimiento. En esa mesa redonda se han abordado los recientes cambios sociales y legislativos que obligan a un acelerado proceso de adaptación para atender a las nuevas necesidades.

Moderada por Patricia Rosety, periodista y presidenta de ACIJUR (Asociación de Comunicadores de Información Jurídica); ha contado con las intervenciones de Ángel Rodríguez Castedo, presidente de la Plataforma de Mayores y Pensionistas; Luis Cayo Pérez Bueno, presidente de CERMI; Rafael de Lorenzo, secretario general de ONCE e Inmaculada Ruiz Martín, presidenta de UDP (Unión Democrática de Pensionistas).

 

 

Ruiz se ha mostrado crítica con "la falta de respeto a los mayores de nuestra sociedad. La vulnerabilidad y la falta de accesibilidad -por ejemplo, tecnológica- nos llevan a ese 'edadismo', que hace que se nos trate como a niños. Desde UDP demandamos un mayor empoderamiento en materia de dignidad, conocimiento, protección de la salud y derecho a una vivienda digna".

"Los mayores son respetables como el más, pero no son respetados. Se les cosifica, se les pone en situaciones de periferia y marginalidad", ha asegurado Pérez Bueno, que ha indicado que "discapacidad y edad avanzada van de la mano, pues casi tres millones de personas con discapacidad son mayores".

De Lorenzo ha demandado "una Ley Estatal Integral de las Personas Mayores, y una Convención internacional en este ámbito, en simetría con lo que ha hecho la discapacidad. En el Derecho apenas hay normas que mencionan la protección de los mayores, sólo la Ley de la Dependencia".

La sostenibilidad de las pensiones fue el principal punto que ha abordado Rodríguez Castedo: "Distribuimos mal los ingresos, sólo un 12 por ciento del PIB se dedica al sistema de pensiones, menos que en Europa, a pesar de que España es la cuarta economía de la zona euro". Otro dato de relevancia que ha puesto de manifiesto ha sido el paro, que repercute en la jubilación: "Sólo trabajan 59 de cada 100 personas; mientras que en los países nórdicos se llega al 84. Un buen empleo genera buenas pensiones".

XII Congreso Notarial Español

Más de 70 destacados expertos del ámbito sanitario, político, económico, universitario, sociológico y jurídico se reúnen en Málaga los días 19 y 20 de mayo para debatir sobre el envejecimiento de la población y los retos, tanto regulatorios como jurídicos y sociales, que presenta. Es en el XII Congreso Notarial Español, una cita organizada por el Consejo General del Notariado que congrega a más de 400 asistentes de todos los ámbitos de la sociedad civil.

Bajo el lema El envejecimiento de la sociedad: principal desafío del siglo, el encuentro analiza la necesidad de contar con un marco jurídico que integre adecuadamente todas las perspectivas en el abordaje de este asunto y permita su implementación garantizando el pleno respeto a la dignidad y libertad de las personas. Para ello, cuenta con una extensa agenda de mesas diálogo que se estructura en torno a tres temáticas: La dignidad vs. la protección de la vulnerabilidad; La vida centenaria y su previsión individual; y La vida centenaria y su previsión social y política.