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Desahucian a Blanca, la mujer de 78 años que debía 88 euros

María Bonillo

Jueves 1 de febrero de 2024

5 minutos

El pasado mes de noviembre se consiguió detener su desahucio con la posibilidad de un acuerdo

Consiguen detener el desahucio de Blanca, una mujer de 78 años que debía 88 euros
María Bonillo

Jueves 1 de febrero de 2024

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El pasado mes de noviembre, Blanca, una mujer de 78 años a la que iban a desahuciar de su piso por el retraso en un pago de 88 euros, pudo respirar tranquila, al menos por el momento. Y es que, a pesar del aviso de desahucio, este logró detenerse tras una protesta que se convocó frente a la casa de la mujer.

"La propiedad ha cedido y se ha comprometido a negociar un alquiler", informaba Resistimos en el Gótico en sus redes sociales, una asamblea de vivienda del Gòtic formada por vecinas del barrio barcelonés que luchan "contra la especulación inmobiliaria a través del apoyo mutuo".

Según denunciaban, la propietaria del piso desde 2010, una "abogada gran tenedora", solo quería el piso "para especular" y había rechazado las propuestas de "alquiler por 5 años a un precio más elevado que el actual" y de "alquiler a precio de mercado pagado con la ayuda de Servicios Sociales". 

El problema no eran esos 88,80 euros que la propietaria acusaba a Blanca de no haber pagado por unas obras que se realizaron en el piso, "sino la especulación", porque "están pagados desde hace años", aseguraban, aunque el juez determinó que había un retraso en el pago y era "suficiente para desahuciar a Blanca".

"Blanca tiene un alquiler de renta antigua, y la propietaria actual, la abogada Susana Martínez, lo sabía cuando compró el piso. Hace unos 4 años acusó a Blanca de no haber pagado 88 € por unas obras mal hechas en el piso. Inicialmente, un juzgado dio la razón a Blanca. Sin embargo, la propietaria siguió insistiendo en juzgados hasta que un juez le dio la razón y dictó orden de desahucio. Por 88 euros. La realidad es que, como ya ha hecho en otros pisos de la finca, quiere el piso para dividirlo y ponerlo en alquiler de temporada", explicaban. 

Con todo, y a pesar de que en ese momento consiguieron detener el desahucio, pocos meses después Blanca ha tenido que dejar su casa este jueves, en la que vive desde 1968, más de 55 años.

 

 

Desde la asamblea de vivienda del Gòtic consideran que la responsabilidad de lo ocurrido "es del Ayuntamiento de Barcelona, ​​y mucho especialmente del Área de Derechos Sociales, encabezada por María Eugènia Gay, por haber roto a última hora, de forma totalmente opaca y vergonzosa, el acuerdo que estaba hecho", según indicaban en un comunicado.

Exigían, así, al Ayuntamiento que "al menos limite los daños y realoje a la Blanca inmediatamente en la vivienda pública que espera", pues esta noche la mujer ha dormido en una pensión que se encuentra fuera del barrio. 

 

 

"Recordemos que el pasado noviembre detuvimos a puerta, con la ayuda de mucha solidaridad vecinal y del movimiento por la vivienda, el 5º intento de desahucio de Blanca en unas circunstancias muy difíciles y en un caso extremadamente mediatizado por medios de comunicación de todo el Estado. Después de años en los que la propiedad, una abogada rentista multipropietaria se había negado a negociar, la presión de la gente organizada logró que se detuviera el intento de lanzamiento, y forzó un compromiso entre la propietaria y el Ayuntamiento de sentarse y buscar un acuerdo", explican. 

El acuerdo se debía realizar antes de este jueves 1 de febrero, o se procedería al desahucio, indican. "En estos 3 meses se han sucedido las negociaciones y ahora, hasta hace pocas horas, todo estaba hecho. Ayuntamiento y propiedad asumían el acuerdo de pago de cuotas (Blanca seguiría abonando el dinero correspondiente a la renta antigua. El Ayuntamiento lo completaría hasta los 1.000 euros exigidos por la propiedad), con una fecha fija (alrededor de un año) para la llegada de la vivienda pública".

Sin embargo, "a última hora", criticaban que el Ayuntamiento se había echado para atrás, poniendo excusas "absurdas, poco coherentes y creíbles", como que: "No se pueden avalar acuerdos de cuotas", cuando "se han hecho decenas en los últimos años", aclara la asamblea, o que "Blanca tiene recursos", cuando "tiene informe de vulnerabilidad y un piso de Mesa de Emergencia asignado", añaden. 

Desde Resistimos en el Gótico tienen claro que "los pagos de cuotas de alquiler a propietarios especuladores no atacan la raíz del problema ni son una solución en sí mismos, como ya hemos manifestado en numerosas ocasiones, y significan una transferencia de dinero público a rentistas y especuladores, pero es evidente que permiten a muchas personas en proceso de desahucio seguir viviendo su hogar habitual mientras esperan un piso de mesa de emergencia".

Este resultado no solo ha provocado el desahucio de Blanca, "cuando podía haberlo impedido", sino que temen que "abocará a muchísimas personas en riesgo de desahucio a sufrir la misma situación", finalizaban. 

Sobre el autor:

María Bonillo

María Bonillo

María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.

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