Cómo guardar los bañadores para que duren otra temporada

Ya de lleno en el mes de septiembre, las jornadas de playa o piscina son cada vez menos frecuentes e, incluso, algunos de nosotros ya hemos dado por cerrada la temporada de baño. Toca pues despedirse, no sin pena, de los días de playa, las zambullidas, los chiringuitos y las tumbonas. Y toca también, entonces, guardar los bañadores y biquinis durante los meses de frío. 

Lo haremos pensando ya en el momento de volver a sacarlos el próximo verano. Pero para que cuando llegue ese esperado momento no nos llevemos un chasco y nos encontremos unos bañadores en mal estado es mejor seguir una serie de consejos para que la ropa de baño nos dure más tiempo y luzca como el primer día. Y es que hay que tener en cuenta que bañadores y biquinis están expuestos a factores que los dañan como son el cloro, la arena, el sudor, la sal o las cremas protectoras. Y, en este sentido, dejarlas bien limpias y guardarlas correctamente es muy importante para que su vida útil sea larga. Para ello deberemos seguir estas pautas:

Lavado suave

Al finalizar la temporada de verano, es adecuado lavar las prendas de baño a mano con agua tibia y jabón suave (tener cuidado de no dejar un tiempo excesivo los bañadores en remojo porque se pueden deteriorar las gomas). Hemos de evitar el agua muy caliente y el detergente en polvo porque pueden dañar este tipo de prendas. Y también mejor evitar el suavizante porque da de sí las fibras y los elásticos. Y, si igualmente queremos utilizar la lavadora, hacerlo en un programa para ropa delicada y sin otras prendas. 

Secado al aire

Una vez lavadas, es importante que las prendas de baño se sequen por completo y al aire libre. Y es que hay que tener en cuenta que si guardamos un bañador húmedo esto facilitará la proliferación de hongos. Por otra parte, durante el secado mejor evitar que les dé el sol directo para no desgastar el tejido (también mejor si las tendemos al revés para proteger el color). Y, aunque ya son tejidos que no lo requieren porque no se arrugan, nunca pasar la plancha sobre los bañadores o biquinis si queremos conservarlos. 

Guardar correctamente

En el momento de guardarlas en el armario durante los meses de frío, hay que hacerlo en una bolsa de plástico hermético o de tela sin que queden las prendas muy aprisionadas por otras. Si las bolsas están forradas de papel la protección frente a la humedad será mayor. 

Por otra parte, también es conveniente guardar bañadores y biquinis con los nudos desechos para que no queden pliegues que deterioren las prendas. 

Y también

Hay otras acciones que pueden contribuir a alargar la vida de las prendas de baño como son ponerlas en remojo con agua y sal o vinagre antes de entrenarlas (esto nos permitirá fijar los colores). También es útil ir con cuidado a la hora de aplicarnos el protector solar y evitar manchar los bordes de bañadores y biquinis (algunos dejan manchas muy difíciles de quitar). Y, por último, tener en cuenta donde nos sentamos cuando llevamos estas prendas porque son delicadas y se pueden rozar fácilmente en superficies ásperas, por ejemplo.