¿Qué es la leche evaporada y cómo puedo emplearla en la cocina?

¿Conoces la leche evaporada? Su uso se está extendiendo cada vez más a la hora de elaborar salsas y postres. Si todavía no las has usado en tus platos, te dejamos algunas ideas para que puedas incorporarla a tus elaboraciones.

La leche evaporada es leche de vaca a la que se le ha retirado aproximadamente un 60% de agua. El resultado es un concentrado de leche muy nutritivo, de una textura más densa que la leche normal. Es aromática y de un color amarillento. Si le añadiéramos el porcentaje de agua que se ha evaporado del producto, tendríamos de nuevo la leche de consumo tradicional. La podemos adquirir en el supermercado envasada en brik o en lata. Un envase que, después de abierto, necesita refrigeración.

Usos de la leche evaporada

Sin duda alguna, el uso más habitual de este concentrado de leche es el de otorgar una textura cremosa a las salsas y cremas, jugosidad a los bizcochos, etc. Durante los últimos años, la leche evaporada ha ido sustituyendo a la nata en la cocina, sobre todo porque aquella aporta menos grasa que la nata, aunque más proteínas e hidratos de carbono. Y es tan versátil que la podemos emplear para elaboraciones tanto saladas como dulces.

En su vertiente salada, puede usarse como espesante de salsas y en la elaboración de cremas de verduras y de sopas densas como la vichyssoise, por ejemplo. También la podemos emplear a la hora de preparar cualquier salsa para pasta que lleve nata, sustituyéndola, lo cual aligera mucho el resultado final. O si queremos preparar una salsa de queso para acompañar un pescado, sustituyendo la nata por leche evaporada le estaremos quitando grasas a nuestra elaboración.

En las salsas de setas, champiñones, castañas, etc., la leche evaporada aporta cuerpo y ligereza, dejando de lado la cantidad de grasa que sí tiene la nata, por ejemplo. Y, si quieres darle un extra de jugosidad y cuerpo a una tortilla, añade un par de cucharadas de leche evaporada.

Por lo que respecta a las elaboraciones dulces, este tipo de leche nos ofrece muchas posibilidades. Es un ingrediente perfecto para dar jugosidad a los bizcochos y magdalenas caseras. También nos ayuda a con elaboraciones como flanes, natillas o helados, donde aporta cremosidad. Es ideal para elaborar batidos de frutas. ¿Buscas un arroz con leche con un toque especial? Puedes probar con leche evaporada. Las crepes y las tortitas tienen un toque diferente si sustituyes la leche normal por la leche evaporada.